Valle Introducción: • El presente trabajo no trata de una investigación formal, sino de una serie de pensamientos que ayuden a las personas a recapturar el sentido de alegría, regocijo y felicidad en la vida. Se puede lograr esto? Creo que sí, es una hazaña de diario para aquél que se atreva a emprenderla con dinamismo y entrega. • Es necesario aplicar en la propia vida un sentido de desapego hacia las cosas materiales y hacia las personas (sí, aunque se le haga difícil esto), lo cual nos permita ir por la vida con un alto sentido de libertad, responsable, amor por lo nuevo y hasta un gusto por probar circunstancias desafiantes, llenas de aventura deleitante, sin preocupación o miedo de que algo extraño y dañino nos puede ocurrir. • El gozo de la vida se obtiene por los momentos o instantes en los que nos damos oportunidad de detenernos a contemplar la naturaleza, el cielo estrellado, el ocaso en el horizonte o tirados sobre la hierba no deseamos nada, sino sólo descansar y observar los detalles de lo creado. • Esto contraría un tanto a la mente racional, práctica que desea estar siempre ocupada en ¨hacer algo¨, porque así lo dicta el mundo moderno y su educación. El hombre sabio actúa desde su casa y desde ahí mismo puede darse cuenta de los sucesos que ocurren en la vida. • Sólo es necesaria una cierta dosis de sensibilidad, intuición, serenidad para poder escuchar el lenguaje del mundo, que a continuo nos comunica algo. • La vida sólo requiere ser vivida, no se necesita nada más, motivación para vivir con gusto la experiencia de ser humano, sencillez en esta pesquisa que nos llevará años, pero que día a día nos dejará el grato sabor de boca de comprender a fondo el diario vivir. • La alegría nos lleva al descubrimiento de nosotros mismos, primero, y en segundo lugar a imbuirnos no de las tragedias que nos regala el mundo, sino de la paz interior, que busca denodadamente el vivir completamente entregado a hacer el bien a las personas. • La belleza que descubrimos en las cosas nos debe de llevar a un sentido de equilibrio y perfección, que permita el centrarnos cotidianamente en el mundo en medio de los hechos y dar un justo trato al mundo de los sentidos. • Existirá el misterio de la vida? Aquél que nos sorprende desde los colores de la flor más sencilla de los campos, aquél olor que proviene de la cosecha recién hecha, o del volar de las mariposas y abejas en búsqueda del néctar de las flores. • Para esto sólo hace falta un equipo extraordinariamente preciso y precioso: el cuerpo, los 5 sentidos o seis o siete sentidos para doblegarnos y postrarnos maravillados de lo excelso que es la creación. Sólo hace falta oler, tocar, mirar, gustar, oír, con finura los dulces cánticos de lo que nos rodea. Tan sólo basta un segundo, para dedicarlo a la piel y que se le permita sentir el aire fresco, húmedo, tibio del ambiente. • Si cada día nos propusiéramos escribir un poema a la vida, a todas los hechos sencillos que nos ocurren, llenaríamos rápidamente un estante con libros escritos con nuestros versos a los ríos, mares, campos, mujeres, niños, ancianos, luz, y hasta a las estrellas y galaxias nos atreveríamos a componerles una poesía celestial, llena de optimismo y sabor a eternidad. • Recuperar el estado inocente, ingenuo, sencillo, transparente es la dura tarea del humano que busca aquí y ahora su autotrascendencia, no al morir, sino ahorita, en vida. • Mirar el mundo con los ojos del niño es aprenderlo a mirar sin malicia, con candor. • El niño, si su condición familiar es sana en todos sentidos, naturalmente es feliz, vive feliz, su estado natural es la felicidad; podremos alcanzar de vuelta ese estado primigenio, ancestral? Sí. Seguro que sí, pues dentro llevamos la semilla del amor, queramos o no, ahí está puesta. • Hace años me encontré un libro en inglés cuyo título era: ¨ 10,000 things to be happy about¨ (10,000 cosas para ser feliz¨). Lo hojeé y me dí cuenta que hasta el comer una nieve puede conducirnos a estados de bienestar y contento con nosotros mismos, gozar cada sorbo, saborear delicadamente el helado es aprender a estar alegre hasta por lo más pequeño del día. • Si nos propusiéramos ser lancheros, nuestra única actividad sería la de remar con nuestra lancha, día a día, y mientras eso nos aconteciera la vida ya habría transcurrido. Pero qué es verdaderamente lo esencial en eso? El haber aprendido el significado de la vida, el diario vivir del lanchero significa en muchas ocasiones estar en silencio y escuchar el sonido de los remos sobre el agua, y en ello la reflexión sobre lo que le pasa, unido a la armonía de lo que le circunda. • Acumulación de experiencias, es eso y no otra cosa la vida, pero la forma en que se acumulan y se analizan y cambian es lo que nos hace diferentes uno del otro. • Aprender a escuchar el río, diría Herman Hesse, en palabras de Siddharta. Aprender y comprender profundamente lo que la vida nos dice a cada uno. • Después de pasar la etapa infantil, pareciera que olvidamos qué es la felicidad y entonces es necesario reaprender aquello que olvidamos. Reaprender a amar, reaprender a gozar, a reír, a estar en plenitud. • ¨El arte de vivir¨ no tiene nada que ver con ¨el negocio de vivir¨. • O se ama lo esencial, o se ama el dinero; es imposible que uno exista dentro del otro, son como el agua y el aceite, solos se separan. • Vivir con regocijo es tener sólo aquello que es necesario para seguir viviendo, los lujos sobran; hace falta el pan para todos. Cuando el hambre acaba el humano necesita, está en sí, el deseo de mirar más hacia lo desconocido…. ¨DUC IN ALTUM¨. (Rema más adentro…) Sean Fel ic es ! J.B .