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La situación actual en la que parece que todo se derrumba ante nuestros ojos...

hace que la pregunta se vuelva todavía más urgente...

¿Es posible esperar?"

La gracia es la certeza de la fe, que es como una semilla de tamarisco, una de las plantas más bellas que existen. La semilla de tamarisco es pequeña, una pequeña semilla que se confunde con la tierra al sembrarla;

con el tiempo se desenrolla, se desenrolla y sale de ella una planta grande con esos bellos cabellos largos, con una rola de perlas que son las florecillas, y que, al mínimo soplo del viento, se mueven como cuando alguien sopla en los largos cabellos de una mujer.

La gracia grande de la que nace la esperanza es la certeza de la fe; la certeza de la fe es la semilla de la certeza de la esperanza

La pequeña semilla que sembramos hoy sólo en septiembre del año próximo comenzará a brotar, y sólo cuando pasen cuatro o cinco años comenzará a perfilarse como un pequeño arbusto con sus características gentiles y extrañas.

es posible esperar cuando existe la fe"

Para esperar hace falta haber recibido una gran gracia. La gran gracia representa y asegura un presente en el que se ha injertado una semilla extraña que permite que florezca la esperanza en el mañana.

"Florece la esperanza del día que no muere"

Elaborado por Carolina Esteche Textos de Luigi Giussani Año 2009

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