La esposa de Lot influyó negativamente en él al separarlo de Abraham y mantenerlo en Sodoma. Una esposa de un anciano puede hacer mucho bien si tiene un espíritu de abnegación y amor por las almas. La madre ejerce una influencia infinita en el hogar y puede transformar la vida familiar haciendo del hogar un lugar de bendición. Los padres deben enseñar la obediencia a los hijos desde una edad temprana para formar su carácter.
La esposa de Lot influyó negativamente en él al separarlo de Abraham y mantenerlo en Sodoma. Una esposa de un anciano puede hacer mucho bien si tiene un espíritu de abnegación y amor por las almas. La madre ejerce una influencia infinita en el hogar y puede transformar la vida familiar haciendo del hogar un lugar de bendición. Los padres deben enseñar la obediencia a los hijos desde una edad temprana para formar su carácter.
La esposa de Lot influyó negativamente en él al separarlo de Abraham y mantenerlo en Sodoma. Una esposa de un anciano puede hacer mucho bien si tiene un espíritu de abnegación y amor por las almas. La madre ejerce una influencia infinita en el hogar y puede transformar la vida familiar haciendo del hogar un lugar de bendición. Los padres deben enseñar la obediencia a los hijos desde una edad temprana para formar su carácter.
irreligiosa, que ejerció su influencia para separar a su marido de Abrahán. Si no hubiera sido por ella, Lot no habría quedado en Sodoma, privado de los consejos del sabio y piadoso patriarca. . . Acordaos de la mujer de Lot. (Luc. 17: 32). Mientras su cuerpo estaba en la llanura, su corazón se asía de Sodoma, y con Sodoma pereció. Se rebeló contra Dios porque sus juicios arrastraban a sus hijos y sus bienes a la ruina. Aunque fue muy favorecida al ser llamada a que saliera de la ciudad impía, creyó que se la trataba duramente, porque tenía que dejar para ser destruidas las riquezas que habían acumulado con el trabajo de muchos años. En vez de aceptar la salvación con gratitud, miró hacia atrás presuntuosamente deseando la vida de los que habían despreciado la advertencia divina. Su pecado mostró que no era digna de la vida, por cuya conservación sentía tan poca gratitud. La apariencia personal es importante
Primera impresión (relacionar la apariencia con
las verdades que representa). La indumentaria (hablaba por si sola ). El habla (Medite antes de hablar) “No te apresures a hablar; sé discreta. Nunca te alabes; por el contrario, piensa cada vez menos en ti, habla menos de ti misma y deposita todas tus cargas en Jesús. Deseo que el Señor te ayude a lograr la vida eterna. . .” (Cada día con Dios, pág. 38) LA ESPOSA DEL ANCIANO
Debe acompañar a su esposo en la ganancia de almas.
Debiera tener el mismo interés que él en hacer el bien. Debiera estar dispuesta a acompañar a su esposo, si las tareas del hogar lo permiten, y debiera ayudarle en sus esfuerzos para salvar almas. Con mansedumbre y humildad, y sin embargo con una noble confianza propia, debiera ejercer una influencia orientadora sobre las mentes de las personas que la rodean, y debiera desempeñar su parte y llevar su cruz y su carga en las reuniones, junto al altar familiar y en las reuniones de conversación junto al hogar. Influencia de la esposa
La esposa de un anciano puede hacer mucho si
así lo quiere. Si posee el espíritu de abnegación y amor por las almas, puede hacer con él casi la misma cantidad de bien.
Una obrera en la causa de la verdad puede
comprender ciertos casos y puede influir en ellos, especialmente entre las hermanas, cosas que el anciano no podría hacer (Evangelismo 489) Influencia de la esposa
Su indumentaria, su vida y conversación debieran
ser un ejemplo que tenga sabor de vida y no de muerte. Deben asumir una actitud de humildad, aunque digna, sin dedicar su conversación a cosas que no tienden a dirigir la mente hacia el cielo. Su gran pregunta debe ser: " ¿Cómo puedo salvar mi propia alma, y ser el medio de salvar a otros?" Vi que Dios no acepta una obra tibia al respecto. Debe ejemplificar la religión en el hogar
Recuerde la esposa del predicador que tiene hijos, que ella
tiene en su hogar un campo misionero en el cual debe trabajar con energía incansable y celo invariable, sabiendo que los resultados de su trabajo perdurarán por toda la eternidad. ¿No son las almas de sus hijos de tanto valor como las de los paganos? Atiéndalos, pues, con amante cuidado. Le ha sido encargada la responsabilidad de demostrar al mundo la fuerza y excelencia de la religión en el hogar. Ella ha de ser regida por los principios, no por los impulsos, y ha de trabajar con el sentimiento de que Dios es quien le ayuda. No debe permitir que nada la aparte de su misión. Debe ejemplificar la religión en el hogar
La influencia de la madre que tiene íntima relación
con Cristo es de valor infinito. Su ministerio de amor hace del hogar un Betel. Cristo obra con ella, transformando el agua común de la vida en el vino del cielo. Sus hijos se criarán para serle una bendición y honra en esta vida y en la venidera (Obreros Evangélicos, págs. 217, 218. Año 1915). La obra importante en el hogar
Si hombres casados, van a la obra misionera y dejan a sus
esposas en casa para que cuiden a los niños, la esposa y madre está haciendo una obra tan grande e importante como la que hace el esposo y padre. Mientras que el uno está en el campo misionero, la otra es misionera en el hogar, y con frecuencia sus ansiedades y cargas exceden en mucho a las del esposo y padre. La obra de la madre es solemne e importante, a saber, la de amoldar las mentes y formar el carácter de sus hijos, prepararlos para ser útiles en esta vida, e idóneos para la venidera, inmortal. (Ev 491) La obra importante en el hogar
El esposo puede recibir honores de los hombres en el
campo misionero, mientras que la que se afana en casa no recibe reconocimiento terreno alguno por su labor; pero si trabaja en pro de los mejores intereses de su familia, tratando, de formar su carácter según el Modelo divino, el ángel registrador la anotará como uno de los mayores misioneros del mundo. (Ev 491) Evitar el espíritu quejoso
Solemne es su vocación y sus compañeras pueden ser para
ellos una gran bendición o una gran maldición. BENDICION 1. Pueden alentarlos cuando están abatidos, 2. consolarlos cuando están desanimados, y 3. animarlos a mirar hacía arriba y confiar plenamente en Dios cuando les falta la fe. MALDICION 1. Seguir una conducta opuesta; mirar el lado sombrío, 2. pensar que pasan por tiempos difíciles, y no ejercer fe en Dios, 3. hablar de sus pruebas e incredulidad con sus compañeros, 4. albergar un espíritu quejoso y murmurador, y ser un lastre y hasta una maldición para ellos. . .(Ev 491) La atmósfera del hogar
Si en el seno de nuestras familias conserváramos
tierno el corazón; si se manifestara una noble y generosa diferencia por los gustos y las opiniones de cada cual; si la esposa buscara oportunidades de expresar su amor por su esposo mediante actos corteses; y el marido manifestara la misma amable consideración hacia su esposa, Los hijos participarían del mismo espíritu. El esposo y la esposa han de estar estrechamente unidos en su obra en la escuela del hogar. Deben ser muy suaves y cuidadosos en su manera de hablar, no sea que abran una puerta a la tentación a través de la cual Satanás entre para ganar victoria tras victoria. Deben ser mutuamente bondadosos y corteses, obrando en tal forma que puedan respetarse recíprocamente. Cada uno ha de ayudar al otro a fin de rodear al hogar de una atmósfera agradable y sana. No deberían discutir en presencia de sus hijos. Deberían conservar siempre la dignidad cristiana (Carta 272, EGW.1903). Control de los hijos: sujeción
Pocos padres comienzan suficientemente temprano
a enseñar la obediencia a sus hijos. Generalmente se permite que el niño tome la delantera en dos o tres años a sus padres, quienes se abstienen de disciplinarlo, pensando que es demasiado joven para aprender a obedecer. Pero durante todo este tiempo el yo se va fortaleciendo en el pequeño ser, y cada día torna más difícil la tarea de los padres de dominar al niño. (CN, 77) Sujeción de los hijos
Los niños, a una edad muy temprana, pueden
comprender lo que es más sencillo y fácil para ellos, y, mediante métodos juiciosos, puede enseñárseles a obedecer. Sujeción de los hijos
La madre no debería permitir que el niño la
aventaje ni una sola vez. A fin de mantener su autoridad, no es necesario recurrir a medidas duras; una mano firme y constante y una bondad que, convence al niño de vuestro amor cumplirán este propósito. Pero si se permite que el egoísmo, la ira y la obstinación se posesionen del niño durante los tres primeros años de su vida, resultará muy difícil someterlo a una disciplina conveniente. Hijos en sujeción
"Y te alegrarás en todo el bien que Jehová tu Dios te haya
dado a ti y a tu casa". Deberían manifestarse agradecimiento y alabanza a Dios por las bendiciones temporales y por todo el bienestar que derrama sobre nosotros. Dios quiere que cada familia que se está preparando para habitar en las mansiones eternas le tribute gloria por los ricos tesoros de su gracia. Si se educara a los niños, en la vida de hogar, para que sean agradecidos al Dador de todas las cosas buenas, veríamos manifestarse en nuestra familia un elemento de gracia celestial; se vería gozo en la vida doméstica, y los jóvenes que procedieran de esos hogares llevarían consigo un espíritu de respeto y reverencia a la escuela y a la iglesia. Habría concurrencia en el santuario donde Dios se reúne con su pueblo, reverencia en todas las ceremonias de su culto, y gozosa alabanza y agradecimiento por todos los dones de su providencia.