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EL JUEGO

TRADICIONAL Y EL
JUEGO
ELECTRÓNICO
El juego tradicional
Los juguetes tradicionales como las pelotas, los peluches, las muñecas o las cocinitas siguen estando disponibles y
cada año muchos niños lo piden en su carta a los reyes o de santa y Se recomiendan este tipo de juegos porque:
Facilitan que los niños interactúen en familia.
Aumentan la posibilidad de que conozcan a otras personas y se sociabilicen: jugando a juegos en grupo e
interactuando.
Reciben estímulos para hablar y aprenden palabras nuevas.
Suelen ser juegos menos sedentarios: estos tipos de juegos mejoran las habilidades motoras de los niños,
porque, en general, les obligan a moverse y a hacer ejercicio.
Aprenden juegos nuevos continuamente: y hacen volar, de este modo, su imaginación y creatividad.
Aprenden sobre el medio a través del contacto directo y de experiencias reales y ricas.
El juego electrónico
Los videojuegos y los nuevos dispositivos electrónicos, por su parte, presentan también una oferta atractiva
para los niños. Debemos saber que los niños que juegan con este tipo de juegos también pueden obtener
nuevos conocimientos y sacarles provecho, siempre y cuando no hagan un uso excesivo de ellos.
Los principales beneficios de estos juegos para los niños son:
Desarrollan aptitudes como la lógica, la estrategia y el ingenio.
Viven experiencias que no podrían vivir en la realidad.
Pueden fomentar las actividades en equipo.
Ayudan a tener una motricidad fina
Cabe añadir, además, que algunos videojuegos están dirigidos a un público con algún tipo de discapacidad
o problema de aprendizaje y estos juegos pueden ser beneficiosos para su salud y bienestar.
Consecuencias de los juegos
electrónicos
El problema es el de la insensibilización. Igual que el niño adopta modelos de conducta mediante el juego,
adquiere también valores y actitudes. Y en muchos de estos juegos, por muy virtuales que sean, se normaliza
la violencia como medio para resolver conflictos, o se justifican conductas discriminatorias.
◦ No interactúan con la familia, o lo hacen mucho menos.
◦ No conocen a otras personas, otros niños y mayores
◦ No hablan.
◦ No se mueven del asiento, y como sabemos el sedentarismo es enemigo de la salud.
◦ La vista se cansa al estar centrada continuamente en mirar tan de cerca. Lo habitual es que el ojo vaya
alternando la visión de cerca y lejos. Sobre los cambios de color y brillo de la pantalla hay opiniones diversas
en cuanto al efecto sobre la vista; en cualquier caso, se desaconseja el abuso y alternar los videojuegos con
otras actividades.
◦ No aprenden juegos nuevos (o como mucho conocen videojuegos nuevos, pero suelen “engancharse” al
mismo juego). Entonces la imaginación vuele menos.
◦ No aprenden sobre el medio a través del contacto directo, a través de experiencias reales, mucho más ricas
que si son a través de las pantallas.
El juego como proceso de socialización:
◦ Mediante el juego el niño ensaya y practica muchas de las actividades a las que se enfrentará en la
vida adulta. Por eso, a partir de los cuatro años gran parte de la actividad lúdica del niño se invierte
en la imitación de modelos. Y normalmente estos modelos son tomados de los adultos que rodean
al niño. Luego jugar con juguetes electrónicos que requieran el manejo de joysticks, ratones,
botones y teclas, pantallas o interfaces… asegurará la posterior adaptación del niño al mundo
tecnológico en el cual vivimos.

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