Es necesario a la hora de hacer un desarrollo o diseño arquitectónico, tomar
en cuenta problemas que nos ayuden a solucionar el confort térmicos . Acondicionamiento interiores de nuestro diseño, como son; el tipo de construcción, EL TIPO Térmico en DE MATERIALES, el tipo de orientación y los elementos de protección Arquitectura solar. Se da sí y sólo sí los cuerpos están a distintas temperaturas y desde el de mayor temperatura al de menor. Al igualarse las temperaturas se produce un equilibrio térmico. Transmisión de calor Existen tres maneras distintas de intercambiar el calor, por conducción, convección y radiación. Es la capacidad de los materiales para retener el Inercia térmica calor y cederlo lentamente.
Es el tiempo que toma una diferencia térmica en
manifestarse en la superficie opuesta al Retraso térmico cerramiento.
Es la resistencia de un cerramiento a transmitir el calor.
Aislación térmica El confort térmico se adquiere según una serie de variables ya sean relacionadas al individuo (actividad que desarrolla, ropa, etc.); al medio ambiente que lo rodea (temperatura, humedad y velocidad del aire); o bien a los cerramientos exteriores con fenómenos como el efecto trampa En los materiales se propaga por conducción, adquiriendo o cediendo calor en más o menos tiempo (inercia térmica) y ofreciendo mayor o menor resistencia (conductibilidad térmica). El cambio térmico que se analiza es consecuencia de una diferencia de temperatura entre dos elementos o entre dos partes de un mismo elemento, lo que se conoce
como conducción. Conductividad térmica del material
La conductividad térmica es la propiedad que tienen los
cuerpos homogéneos, tales como la madera, el ladrillo o la piedra, de conducir el calor, referida al espesor. Así existen buenos conductores del calor (malos aislantes térmicos) y malos conductores del calor (buenos aislantes térmicos). Dentro de los materiales de construcción la madera y los tableros aglomerados son considerados aislantes térmicos naturales, gracias a las millones de celdas de aire atrapadas en su estructura, que permiten una mayor resistencia de ésta al paso. Al hablar de materiales térmicos nos referimos principalmente a los aislantes térmicos, Un aislante térmico es un material usado en la construcción y en la industria, caracterizado por su alta resistencia térmica. Establece una barrera al paso del calor entre dos medios que naturalmente tenderían a igualarse en temperatura, impidiendo que el calor traspase los separadores del sistema que interesa (como una vivienda o una nevera) con el ambiente que lo rodea. La distinta capacidad de los sustancias para conducir el calor permite distinguir dos tipos de materiales: conductores y aislantes térmicos. Cuantificación de sus propiedades:
La cuantificación de las propiedades de un aislante es compleja, ya que
cada material reacciona de manera diferente ante las diferentes trasmisiones del calor: radiación, convección, conducción, calor latente/calor sensible y también según la temperatura a la que se encuentre. Para comparar materiales y realizar cálculos se utiliza habitualmente el coeficiente de conductividad térmica, que mide únicamente la conducción. Para que la comparación del coeficiente de dos materiales sea correcta, este debe ser medido a la misma temperatura en ambos. Buenos Aislantes térmicos:
El aire es un buen aislante. Ello explica la eficacia
que tienen, por ejemplo, la ropa de lana y las ventanas con doble cristal para evitar la transmisión de calor por conducción. Las ventanas de doble cristal, con cámara de aire aíslan bien y evitan las pérdidas de calor, al contrario de lo que sucede con las de un solo cristal. Esto se debe a que el aire es un mal conductor del calor. Buenos Aislantes térmicos:
Corcho
Es el material empleado más antiguamente para aislar. Procede
de la corteza del alcornoque. Normalmente se usa en forma de aglomerados, formando paneles. Habitualmente, estos paneles se fabrican a partir de corcho triturado y hervido a altas temperaturas. En general, no es necesario añadir ningún aglomerante para compactar los paneles. Su contenido en agua es inferior al 8 %, y está compuesto en un 45 % por suberina. Estas dos condiciones hacen que sea un producto imputrescible, al que no hay que tratar para protegerlo de hongos o microorganismos, al contrario que la madera. Otra ventaja respecto a otros materiales aislantes es la elevada inercia térmica que presenta. Esta característica lo convierte en un material idóneo para sistemas de aislamiento térmico por el exterior.