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ALEJANDRO BARATTA

III. LAS TEORIAS PSICOANALITICAS


DE LA CRIMINALIDAD Y DE LA
SOCIEDAD PUNITIVA
TEORIAS
SE CENTRAN EN EL
PSICOANALITICAS
CRIMEN Y EN LA PENA
(AÑOS 1920-30)

1ª LINEA Explicación del comportamiento criminal


(Freud y retomada por Moser , 1970)

• Origen en el postulado freudiano de la neurosis y en la aplicación que ha


hecho de ella Freud para explicar ciertas formas de comportamiento
delictivo.
• La represión de los instintos delictivos a través de la acción del Super-Yo no
destruye estos instintos, sino que deja que se sedimenten en el
inconsciente.
• Los instintos se ven acompañados en el inconsciente por un sentimiento de
culpa, una tendencia a confesar. Con el comportamiento delictivo, el
individuo supera el sentimiento de culpa y realiza la tendencia a confesar.
• El comportamiento criminal representa una radical negación del concepto
de culpabilidad, y por tanto, también de todo derecho penal basado sobre
el principio de culpabilidad.
TEORIAS
SE CENTRAN EN EL
PSICOANALITICAS
CRIMEN Y EN LA PENA
(AÑOS 1920-30)

2ª LINEA Teorías psicoanalíticas de la sociedad


punitiva

• Ponen en duda el principio de legitimidad, y con ello, la legitimación misma


del derecho penal.
• La función psicosocial que ellas asignan a la reacción punitiva permite
interpretar como mistificación racionalizante las pretendidas funciones
preventivas, defensivas y éticas sobre las cuales se sostiene la ideología de
la defensa social (principio de legitimidad) y en general de toda ideología
penal.
• La reacción social al comportamiento delictivo no tiene la función de
eliminar o circunscribir la criminalidad, sino que corresponde a mecanismos
psicológicos ante los cuales la desviación criminalizada aparece como
necesaria e indeclinable para la sociedad.
FREUD Tabú= Formación social
(“Tótem y
tabú”) • Al violar un tabú, el primitivo teme atraer sobre sí
una enfermedad seria o la muerte.
• El castigo se presenta de modo espontáneo, sólo
es una forma secundaria de pena la que se realiza
Neurosis= con la intervención del grupo social.
Enfermedad • La intervención punitiva se verifica solamente en
individual función subsidiaria del castigo espontáneo,
puesto que todos los componentes del grupo se
sienten seriamente amenazados por la violación
El enfermo asocia del tabú y por esto se apresuran a castigar al
a la prohibición el violador. Este primitivo mecanismo de solidaridad
temor de una es explicado por Freud mediante la tentación de
pena no para sí, imitar a quien ha violado el tabú; liberando de tal
sino para un modo, como éste lo ha hecho, instintos que de
pariente o para otro modo permanecerían reprimidos.
• La reacción punitiva presupone, la presencia,
una persona que
entre los miembros del grupo, de impulsos
le es próxima.
idénticos a los prohibidos.
Neurosis y psicosis [1924]
“…las neurosis de transferencia nacen a consecuencia de la negativa del yo a
acoger una poderosa tendencia instintiva dominante en el Ello y procurar su
descarga motora, o a dar por bueno el objeto hacia el cual aparece orientada
tal tendencia. El yo se defiende entonces de la misma por medio del
mecanismo de la represión; pero lo reprimido se rebela contra este destino y
se procura, por caminos sobre los cuales no ejerce el yo poder alguno, una
satisfacción sustitutiva -el síntoma- que se impone al yo como una
transacción; el yo encuentra alterada y amenazada su unidad por tal intrusión
y continúa luchando contra el síntoma, como antes contra la tendencia
instintiva reprimida, y de todo esto resulta el cuadro patológico de la
neurosis. No puede objetarse que al proceder el yo a la represión obedece en
el fondo los mandatos del super-yo, los cuales proceden a su vez de aquellas
influencias del mundo exterior que se han creado una representación en el
super-yo. Siempre resultará que el yo se ha puesto al lado de estos poderes
cuyas exigencias tienen más fuerza para él que las exigencias instintivas del
Ello, siendo él mismo el poder que impone la represión en contra de aquellos
elementos del Ello y la afirma por medio de la contracarga de la resistencia.
Así, pues, el yo ha entrado en conflicto con el Ello en servicio del super-yo y
de la realidad. Tal es la situación en todas las neurosis de transferencia.
Theodor Reik y su explicación psicoanalítica
La pena sirve a la satisfacción
Funda teoría de la necesidad del Racionaliza-
psicoanalítica inconsciente de castigo que ciones de los
del derecho impulsa una acción prohibitiva fenómenos
penal basada en que hunden
la doble función La pena satisface la necesidad sus raíces en
de la pena de castigo de la sociedad el
mediante su inconsciente inconsciente
identificación del delincuente.

1. La teoría retributiva encuentra su correspondencia en los autocastigos


inconscientes que hallamos entre los neuróticos y que están reguladas por
la ley del talión: “Desde este punto de vista la teoría de la retribución es
psicológicamente consecuente, pero contradice los progresos de la cultura y
de la humanidad. La retribución como fin de la pena es simplemente la
representación de un impulso, transformada en teoría.” [Reik, 1971]
2. Las teorías de la prevención acentúan la función de la pena ante la sociedad
(prevención general) y ante el autor de un delito (prevención especial).
Theodor Reik y su explicación psicoanalítica
• Ambas concepciones transfieren la función de la pena a un
resultado futuro, que consiste en influir en la colectividad o en
el autor del delito (naturaleza bifronte de la pena).
• Ambas funciones se inscriben en la fundamentación
psicológica del fin de la pena, que parte de la indagación
psicoanalítica que Freud ha hecho del sentimiento de culpa,
precedente al delito, y que no es consecuencia de la acción
delictiva sino de su más profunda motivación.
• Reik concluye en la hipótesis de que la tendencia del
desarrollo del derecho penal es la de la superación de la pena:
“Tal vez llegará un tiempo en que la necesidad de castigo será
menor que la de nuestro presente y en que los meidos que se
hallen para evitar el delito serán a la pena como el arcot iris es
al tremendo temporal que lo ha precedido.”
La teoría psicoanalítica del fin de la pena en
Franz Alexander y Hugo Staub
• Ponen de relieve el mecanismo sociopsicológico a través del cual la
pena inflingida aquien delinque viene a contrabalancear la presión de
los impulsos reprimidos, los cuales con el ejemplo de su liberación en
el delincuente se fortalecen.
• La punición representa de tal modo una defensa y un reforzamiento
del superyó.
“El yo pretende expiación cada vez que se verifica una violación del derecho para
aumentar, cuando se ve presionado por los impulsos, la fuerza del propio superyó. El mal
ejemplo del delincuente obra de modo seductor sobre los propios impulsos reprimidos y
aumenta su presión. Por eso, el yo tiene necesidad de reforzar el propio superyó y puede
recibir este reforzamiento sólo de las personas reales que encarnan la autoridad, las cuales
son el modelo del superyó. Si el yo puede demostrar a los impulsos que también las
autoridades mundanas dan razón al superyó, entonces no existe ninguna ayuda contra el
asalto de las tendencias antisociales. El impulso al castigo es, entonces, una reacción
defensiva del yo contra los propios impulsos, con el fin de su represión para conservar el
equilibrio espiritual entre fuerzas represivas y fuerzas reprimidas. La exigencia de castigar
al delincuente es al mismo tiempo una demostración dirigida hacia lo interno para
desalentar los impulsos: aquello que prohibimos al delincuentes es alto a lo cual vosotros
podéis también renunciar. [Staub, 1971: 388]
Límites de las teorías psicoanalíticas de la criminalidad y de la sociedad
punitiva.
 No han logrado superar los límites fundamentales de la
criminología tradicional.
 Parten de una etiología del comportamiento (igual que las teorías
positivistas), cuya cualidad de criminal se acepta sin análisis de las
relaciones sociales que despliegan la ley y los mecanismos de
criminalización.
 Orientan el propio análisis a la función punitiva sin mediar este
análisis con el del contenido específico del comportamiento
desviado, de su significado dentro de la determinación histórica de
las relaciones socioeconómicas.
 Los momentos de la explicación etiológica del comportamiento
criminal y el de la interpretación funcional de la reacción punitiva,
no son mediatos, sino inmediatamente identificados entre sí: falta
de mediación entre ellos. Consecuencia de una visión ahistórica y
universalizante con la cual se interpretan, mediante estructuras
conceptuales meramente subjetivas y psicológicas, tanto en el
comportamiento criminal como en la reacción punitiva.
Límites de las teorías psicoanalíticas de la criminalidad y de la sociedad
punitiva.
 Ni el análisis del comportamiento criminal puede hallar su elemento
integrador en el análisis históricamente situado de las relaciones sociales
que explican la ley y las instituciones penales, ni, viceversa, el análisis de la
reacción punitiva puede hallar su elemento integrador en el análisis del
contenido de la desviación como expresión de determinadas relaciones
socioeconómicas y de sus contradicciones materiales.
 La visión universalizante del delito y de la reacción punitiva es un elemento
constante de toda criminología liberal contemporánea. Los fenómenos,
históricamente condicionados, de la desviación y del control penal de ésta,
en lugar de interpretarse en su real contenido, a la luz de determinadas
relaciones socioeconómicas en que ellos se inscriben, son hipostasiados
como elementos de una concepción genérica y formal de la sociedad.
 Así como las teorías psicoanalíticas reconducen la concepción de la
universalidad del delito hacia el natural antagonismo entre individuo y
sociedad, la teoría funcionalista, según se verá, reconduce la universalidad
del delito hacia su relación normal con la estructura social, hacia su función
positiva, dentro de ciertos límites, para la consolidación y el desarrollo de
esta estructura.

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