Brote: es la entrada de fluidos provenientes de la formación al pozo,
tales como aceite, gas, agua o una mezcla de estos durante el trabajo de perforación. Al ocurrir un brote, el pozo desaloja grandes cantidades de lodo de perforación en mayor proporción a lo normal o calculado, ocasionando un aumento de la presión de formación y al ser mayor que la presión hidrostática, si dicho brote no es detectado o corregido a tiempo, se produce un reventón o descontrol. Descontrol: es un brote fluidos, el cual no se puede controlar de manera adecuada mediante los mecanismos creados para tal fin. Esto ocurre como resultado de la falta de atención a los medidores en superficie, y/o a la reacción tardía del personal.