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SEGURIDAD SOCIAL

1. Sistema, regímenes y gestión.


La Seguridad Social es un sistema público de previsión, que contiene
múltiples prestaciones ante diferentes riesgos, y que posee cobertura
universal, dado que trata de proteger al conjunto de los ciudadanos ante
situaciones de necesidad.

Dentro de la Seguridad Social existen varios regímenes: General y


Especiales.

• El Régimen General protege al colectivo más amplio, los trabajadores por


cuenta ajena del comercio, industria y servicios, así como al personal
laboral de las administraciones públicas.

• Los Regímenes Especiales cubren, con características diversas en cuanto


a cotización y prestaciones, a actividades que precisan una normativa
específica: Autónomos, Actividades Agrícolas, del Mar, Estudiantes, etc.
La infraestructura de la Seguridad Social cuenta con una serie de
organismos, de los cuales los más reseñables son:

• Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS): reconoce y


gestiona las prestaciones económicas de tipo contributivo.

• Tesorería General (TGSS): recauda (cotización) fondos para el


sistema y abona las prestaciones reconocidas a sus titulares.

Además de estas entidades gestoras, colaboran con la gestión del


sistema las Mutuas de Accidentes de Trabajo y Enfermedades
Profesionales, en relación con las prestaciones derivadas de
contingencias profesionales, y las empresas, que colaboran en la
recaudación y el pago delegado de prestaciones.
2. Acción protectora.
La acción protectora consiste en las prestaciones, económicas (pensiones,
subsidios, indemnizaciones) y no económicas (asistencia sanitaria y
similares) que el sistema facilita a sus beneficiarios. Estas prestaciones
pueden ser, a su vez:

• Contributivas: cubren a trabajadores y beneficiarios que han cotizado un


mínimo período de carencia.

• No contributivas: cubren a beneficiarios que no han cotizado (o no han


cotizado el mínimo) y carecen de recursos económicos

A. Asistencia Sanitaria: servicios médicos y farmacéuticos necesarios para


conservar o restablecer la salud del titular y/o sus beneficiarios.

B. Incapacidad Temporal: subsidio que sustituye los ingresos salariales de un


trabajador que está de baja médica por enfermedad o accidente (sea o no
laboral).
B. Incapacidad Temporal:
• Requisitos: sólo para el caso de enfermedad común se necesita que el
trabajador haya cotizado 180 días en los 5 años anteriores.
• Base reguladora:
» Contingencias comunes: se utiliza como base de cálculo la base de
cotización de contingencias comunes del mes anterior a la baja.
» Contingencias Profesionales: se utiliza como base la base de
cotización de contingencias profesionales, incluyendo el
promedio de horas extras del año anterior a la baja.
• Cuantía de la prestación:
» Contingencias comunes:
• Del primer al tercer día no hay cobertura
• Del 4º al 20º se cobra el 60% de la base reguladora
• Del día 21º hasta el alta se cobra el 75%
» Contingencias profesionales: desde el día siguiente a la baja se
cobra el 75% de la base reguladora
C. Riesgo durante el embarazo y lactancia: subsidio del 100% de la base
de cotización de contingencias profesionales.

D. Maternidad:
• Requisitos:
– Menores de 21 años: no se necesita período de carencia.
– entre 21 y 26 años: 90 días cotizados en los 7 años inmediatamente
anteriores.
– Más de 26 años: 180 días cotizados en los 7 años inmediatamente
anteriores.

• Cuantía:
– Caso normal: 100% de la base de contingencias comunes del mes
anterior a la baja (durante 16 semanas).
– Subsidio especial para trabajadoras que no cumplen el requisito de
cotización mínima: 100% del importe del IPREM durante 42 días
naturales.

E. Paternidad: subsidio del 100% de la base de contingencias comunes


del mes anterior (durante 4 semanas)
F. Lesiones permanentes no invalidantes: en caso de secuelas
definitivas causadas por accidentes de trabajo o enfermedad
profesional, que no sean de gravedad suficiente para reducir la
capacidad de trabajo, existe un baremo de indemnizaciones que
la seguridad Social paga al trabajador que ha sufrido tales
secuelas (por ejemplo, se abona una cantidad única por haber
perdido una falange de un dedo)

G. Incapacidad Permanente: situación en que un trabajador, que


ha estado en tratamiento de recuperación de accidentes o
enfermedades, sean o no laborales, sufre daños anatómicos o
funcionales que le reducen o eliminan su capacidad para el
trabajo. El INSS es el organismo encargado del reconocimiento de
los diferentes niveles y prestaciones por incapacidad
permanente. Sólo se precisa período mínimo de cotización para
la Incapacidad Permanente derivada de enfermedad común.
Existen cuatro grados de Incapacidad Permanente:

• Incapacidad Parcial: reducción de al menos el 33% de la capacidad de trabajo,


aunque el trabajador puede realizar las tareas fundamentales de su profesión
habitual.
– No autoriza la extinción de contrato: sigue contratado.

• Incapacidad Total: el trabajador no puede seguir realizando su trabajo habitual, pero


puede trabajar en otras actividades.
– Extingue el contrato, y el trabajador, además de cobrar su pensión, puede
encontrar un nuevo empleo.
– Prestación: pensión vitalicia del 55% de la base reguladora, elevable al 75% para
trabajadores de mas de 55 años.

• Incapacidad Absoluta: el trabajador no puede realizar ninguna actividad laboral.


– Extingue el contrato, y es incompatible con cualquier trabajo.
– Prestación: pensión vitalicia del 100% de la base reguladora.

• Gran Invalidez: persona dependiente, que precisa la asistencia de otra para realizar
actos habituales de la vida cotidiana.
– Prestación complementaria, de un mínimo del 45% de la base mínima de
cotización vigente en el momento del hecho causante.
H. Jubilación: pensión vitalicia, sustitutiva del salario del trabajador que
se jubila.
– Requisitos:
• tener cumplidos 67 años (o 65 años, si se ha cotizado 38 años y 6
meses).
• haber cotizado 15 años, de los cuales 2 deben pertenecer a los 15
años inmediatamente anteriores a la jubilación.

– Base reguladora: la base de cálculo es el promedio de las bases de


cotización de los 300 meses inmediatos a la jubilación (25 años).
– Cuantía: a la base reguladora se le aplica un porcentaje que depende
del número de años cotizados:
• por 15 años cotizados (mínimo), el 50% de la base reguladora
• por los meses adicionales:
– cada mes entre 1 y 248 incrementa la pensión un 0,19 %
– del mes 248 en adelante, se incrementa un 0,18%
– Jubilación anticipada:
• Voluntaria; debe tener cumplidos 63 años, y cotizados 33, con
una reducción de pensión de 1,875% por trimestre de antelación
a la edad ordinaria de jubilación.

• Involuntaria: el trabajador es mayor de 61 años y lleva inscrito en


el desempleo un mínimo de 6 meses, por haber perdido su
empleo por causas ajenas a su voluntad. Cotización mínima de 33
años, y reducción de 1,875% por trimestre.

– Incremento de pensión por prolongación de la vida laboral más allá


de edad ordinaria: oscila entre un 2% y un 4%, según el número de
años cotizados.
I. Muerte y supervivencia: prestaciones dirigidas a familiares
beneficiarios del titular fallecido:

– Auxilio por defunción.

– Viudedad y parejas de hecho:

• Existe una pensión vitalicia y otra temporal (máximo de 2 años) para


casos de matrimonios de corta duración o sin hijos comunes).

• Para parejas de hecho inscritas un mínimo de 2 años antes del


fallecimiento y que acrediten convivencia durante 5 años, siempre
que los ingresos del superviviente no superen los del fallecido.

• La cuantía de la prestación es del 52% de la base reguladora,


excepcionalmente elevable al 70%, por carencia de recursos
económicos del viudo/a.
– Orfandad: prestación del 20% de la base reguladora por cada hijo
menor de edad, o mayor sin recursos económicos suficientes (nueva
normativa: hasta que cumple 25 años).

– Prestaciones a favor de otros familiares: prestaciones temporales o


vitalicias a favor de parientes (hermanos, nietos, padres) que
convivieran con el fallecido, a su cargo, y que no tengan otros
ingresos o pensiones públicas.
3. Desempleo.
A. Nivel contributivo: cubre el desempleo involuntario de quienes han tenido
empleo y lo han perdido en contra de su voluntad. También cubre el
desempleo parcial (reducciones de jornada con reducción equivalente de
salario, de al menos una tercera parte):
• Requisitos:
– Situación legal de desempleo (involuntario).
– Compromiso de búsqueda activa de empleo.
– Cotización mínima de 360 días en los 6 años anteriores.

• Duración de la prestación: en relación al tiempo cotizado, se calcula


mediante una escala, que oscila entre un mínimo de 120 días de
prestación (4 meses) hasta un máximo de 720 días (dos años)
• Base reguladora: promedio de las bases de cotización de
contingencias profesionales de los últimos 180 días (6 meses).

• Cuantía:

– Los primeros 180 días se percibirá un 70% de la base


calculada.

– El resto de tiempo se cobrará un 60% de la base.

– También hay que considerar los topes mínimos y máximos,


relacionados con el número de hijos a cargo (menores de 26
años y escasos ingresos)
B. Nivel no contributivo: prestación asistencial para demandantes de
empleo que se encuentra en un nivel muy bajo de recursos económicos
y, o bien no han cotizado para tener derecho a prestación de
desempleo, o han agotado una prestación. Su importe es el 80% del
IPREM, y su duración depende del tipo de circunstancias del caso

(IPREM: El Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples es el índice de


referencia en España para la asignación de ayudas y subsidios en función de
los ingresos).

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