ideas que deben ser tan claras, sencillas y ordenadas como sea posible.
La característica fundamental de la redacción científica es la claridad.
El éxito de cualquier trabajo de investigación científica es el resultado de un claro diseño metodológico, que aborda un problema claramente formulado y llega a unas conclusiones claramente enunciadas. 1.La cohesión: modo en que lo elementos del texto están relacionados
2.La coherencia: se manifiesta mediante la continuidad de sentido
3.La intencionalidad: queda delimitada en un texto por la
posibilidad de percibir el objetivo que se persigue a lo largo de todo su contenido El título: es la primera impresión que se recibe acerca del trabajo, por lo tanto, debe ser bien estudiado y dar, en la medida en que lo permitan sus límites, una indicación clara y concisa acerca del contenido del trabajo.
El resumen: es una parte importante de cualquier trabajo,
ya que puede considerarse como una versión en miniatura del mismo, debe ofrecer un sumario breve de cada una de sus partes principales. Un resumen bien preparado permite a los lectores identificar rápida y exactamente el contenido de un documento, determinar la pertinencia de su lectura. El resumen no debe exceder de 250 palabras y debe ser de un solo párrafo. La introducción: La finalidad de esta es suministrar suficientes antecedentes para que el lector pueda comprender la importancia de la investigación y la significación de resolver el problema que la justifica.
El desarrollo: En este caso hay que tener en cuenta que es la parte
esencial del trabajo. Es importante su estructuración por capítulos, epígrafes, subepígrafes, etc., en dependencia de la extensión del mismo.
Las conclusiones que demuestran la validez de los resultados. La
precisión con que se dan las conclusiones, haciendo referencia a los aspectos más novedosos que brinda el trabajo y a la validez, impacto y pertinencia de sus resultados es un aspecto vital en cualquier trabajo científico. La calidad de un texto científico también se reconoce por la presencia del lenguaje argumentativo. En tal sentido, es importante distinguir el lenguaje argumentativo del explicativo y el descriptivo.
La exposición es el equivalente abstracto de la descripción.
Su contenido son ideas, pensamientos, opiniones, en suma, abstracciones
La argumentación es el proceso que relaciona la
información de determinadas proposiciones, las premisas, para obtener una nueva información; la conclusión o tesis.
El asentamiento de las fuentes de información está muy
vinculado al rigor con que se muestran los resultados del proceso de investigación en cualquiera de sus etapas,confiere al texto actualidad y credibilidad, en tanto aporta criterios acerca de la validez y pertinencia