Vous êtes sur la page 1sur 30

Corriente del pensamiento

cristiano
Instituto Bíblico Logos
21 al 23 de Mayo, 2018
Introducción
Lectura Bíblica: (Corinto a unos 70 Kms. de Atenas) 1 Co. 1.18- 2.16; Col. 2.8, 18,23
• Lectura del Programa
• Influencia de R. Bultmann en William Barclay: Ej. La resurrección de Lázaro, Jn. 11
• Holanda: casamiento de homosexuales. Croatto, relectura, Adán y Eva: Mitos,
“nada sucedió”
• Modernismo. Grupos de santidad. Iglesia de Dios. Ej. Europa, inmigrantes.
• ¿Pueden y deben condicionar las corrientes del pensamiento humano a la verdad
bíblica? La verdad es una y no cambia. No dejar de predicar y enseñar sobre el
pecado, el arrepentimiento, los milagros, el rapto de la Iglesia, el juicio, etc..
• Se puede dar el mismo mensaje desde otra plataforma (“La nueva tolerancia”, de
Josh McDowell). Mostrar que el Evangelio da resultados.
• Como disparador: partir desde la creencia de ellos/as y presentar el Evangelio
(Pablo en Atenas, el Dios no conocido). Por ej. Armonía, energía, meditación, etc..
1850-2018
• Hoy, en qué nos dañan o ayudan en cuanto a la interpretación y
predicación de la Palabra
• Ataques de afuera con persecuciones y desde adentro con falsas
doctrinas en bibliotecas y clases de seminarios. Jeremías 6.10: No la
aman. Le es cosa vergonsosa , Is. 66.1-2
• Ataques contra Trinidad, Deidad de Cristo, Inspiración de la Biblia.
Introducción (continuación)

• Pensamientos, reflexiones, filosofías, teorías, conclusiones, argumentos,


hipótesis, métodos, ciencias, etc. que nos alejan de Dios, de su Palabra, de
su temor y de la santidad, ¿Qué origen tienen? Que objetivo y resultado
tienen?
• Morgues espirituales
• Profesionales de la duda
• Parece sofisticado y científico, atractivo, desafiante, revolucionario,
académico, etc.. Parece erudición y alto nivel intelectual.
• Dios los llama necios Sl 53.1
René Descartes: Llamado por muchos “el padre de
la filosofía moderna” (1596-1650), francés.
Cartesianismo
• Fundador: Renato Descartes, o Cartesio (1596-1650)
• Obra maestra: “Discurso sobre el método”, donde aparece su
famoso principio: “Pienso, luego existo”
• Todo podría ser falso, menos su existencia.
• “Yo no soy más que una cosa que piensa.”
• Error: Identidad absoluta del alma con el acto de pensar, el ser
subordinado al pensar
• Se piensa algo y es intencional, estoy antes del pensamiento.
• La idea clara y distinta que tengo de un clavel respecto a una
rosa es a posteriori, por el testimonio de los sentidos.
• Veamos cómo lo dice él mismo: «Mientras quería pensar así
que todo era falso, era menester necesariamente que yo, que
lo pensaba, fuese algo; y observando que esta verdad: pienso,
luego existo, era tan firme y tan segura que todas las más
extravagantes suposiciones de los escépticos no eran capaces
de quebrantarla, juzgué que podía admitirla sin escrúpulo
como el primer principio de la filosofía que buscaba». A partir
de ahí, Descartes intenta construir de nuevo el universo con la
ayuda de un criterio fundado en la evidencia: «las
percepciones claras y distintas no pueden ser falsas».
• Al comenzar su tratado de filosofía, dejó de lado la teología.
• A pesar de sus percepciones sensoriales, podría existir algún genio
maligno (el diablillo) que podría engañarle.
• ¿Cómo sabe que existe Dios? A priori. Cuando nuestro pensamiento
revisa las diversas ideas o nociones que tiene en sí y encuentra la de un
ser omnisciente, todopoderoso y sumamente perfecto, juzga fácilmente
que Dios es o existe. Percibe, no solo una existencia posible como en las
demás ideas, sino una existencia absolutamente necesaria y eterna.
• Pretende que la idea del Dios infinito y eterno es innata, pues nuestro
entendimiento es limitado y temporal. Esto es un error, porque la idea
en que conocemos lo infinito y lo eterno, no es directa, sino refleja,
quitando mentalmente los límites de lo limitado y temporal que
conocemos directamente.
• Concibe la antropología como una dualidad de pensamiento, que es
la sustancia del alma, y extensión, que es la sustancia del cuerpo, cuya
única actividad es el movimiento local.
• Para Descartes, la idea no es algo que se le ocurra a la mente
humana, tampoco es algo que el hombre ´piensa como
representación de la realidad, sino que es la misma realidad según la
veo.
• Descartes es radicalmente idealista, y padre del idealismo moderno.
Idealismo, Lacueva, p.330
• “…el idealismo filosófico propiamente dicho, ha de
buscarse en Descartes, Kant y Hegel. Este
idealismo ha influido desfavorablemente en gran
parte de la teología liberal de los últimos siglos,
llegando a ser una fuente muy importante del
liberalismo teológico protestante”.
• Dicc. Larousse: “Doctrina filosófica que niega la
realidad individual de las cosas distintas del ‘yo’ y
no admite más que las ideas .”
UNIDAD II: KIERKEGAARD, EL EXIsTENCIALISMO Y SU
INFLUENCIA HASTA NUESTROS DÍAS
Kierkegaard, Soren A. 1813-1855, Dinamarca
• Padece un terrible dolor oculto. La convicción de que ni la Iglesia ni
los creyentes quieren atender al Evangelio.
• El cristianismo sólo puede practicarse a imitación de Cristo.
• Enfatiza el pecado y gracia, que no se vive en masa, sino como
individuos. A Cristo no se le sigue como sociedad –aunque sea
eclesial- sino como individuo por experiencia personal. La fe es un
acto individual.
• Su pensamiento central y decisivo respecto al cristianismo es el de
que cada creyente individual puede y debe llegar a ser un
contemporáneo de Cristo. La Encarnación es un hecho histórico y,
por lo tanto un objeto adecuado de fe.
• La fe está al otro lado de la muerte de la razón, o el
reconocimiento de su incapacidad para aprehender esta verdad.

• Llama “instante” a la situación en la que un individuo recibe la


fe para confesar la Encarnación. Para ser contemporáneos de
Cristo debemos creer en Él.
Existencialismo, Ramm, p.52
• Aproximación: ciencia, matemática, objetos, etc..
• Apropiación: es el medio por el cual como existentes llegamos a
conocer a Jesucristo.
• La tesis fundamental del existencialismo es que la existencia es previa a la
esencia. Esta tesis significa que mi existencia personal, mi problema de ser, mi
interés conmigo mismo, mi situación en el mundo, es previo y más fundamental
que cualquier teoría acerca del mundo o la realidad. El hombre no puede
empezar con una teoría de la realidad, una metafísica u ontología; puede
empezar solamente donde está, como un ser humano en medio de todas las
contingencias de la existencia humana. Intentar empezar en otra parte, es
intentar lo fantástico.
• En su análisis de la existencia, Kierkegaard desenvuelve una versión
cristiana del existencialismo. La felicidad eterna que el hombre busca
es hallada solamente en Jesucristo encarnado. El es la Paradoja
Suprema que provoca en el hombre la fe como pasión, como
interioridad, como subjetividad. Como existentes no estamos
interesados en proposiciones verdaderas sino en estar personalmente
en la verdad. Cuando respondemos a Cristo como el Dios encarnado
con la pasión de la fe, entonces estamos en la verdad
• Los dos grandes existencialistas del siglo veinte, Sartre y Heidegger,
no intentan formular un existencialismo desde las perspectivas del
cristianismo; por el contrario, han desarrollado existencialismos
ateos. Trabajando desde el ser humano concreto, Dasein, Heidegger
intenta deletrear las categorías básicas del ser, del mundo, de los
objetos en el mundo, y de la historia humana desde la perspectiva
fundamental de Dasein.
Existencialismo, Lacueva, p. 277/8
• Idea aprox. de lo que es el existencialismo:
• 1. El hombre es lo que llega a ser pero, atrapado en su existencia, se
ve arrojado al mundo, teniendo que hacerse a sí mismo a fuerza de
decisiones, entre un manojo de posibilidades, en un mundo sin
rumbo y sin sentido. El hombre es, pues, un «proyecto» = arrojado
hacia adelante, según la etimología. Es, pues, «libre a la fuerza», lo
que produce un estado de angustia permanente, pues la única
certeza posible es la de ser un «ser para la muerte». Incluso los
existencialistas que creen en Dios, aseguran que la fe es «un salto en
el vacío», «un riesgo en la oscuridad”
• 2. …Todavía es más difícil el conocimiento de los demás seres
humanos, puesto que el ser humano está cerrado en su total
alteridad = totalmente otro. También es frase de Sartre: «El infierno
son los demás». Sólo es posible establecer contacto con el prójimo
mediante la intuición, la simpatía, el encuentro «existencial». El
conocimiento de Dios, por su absoluta trascendencia, es totalmente
imposible, por estar fuera de los límites de nuestra experiencia
personal intramundana. Para Sartre, que es el verdadero
existencialista, «es imposible que Dios exista».
• 3 …De aquí se sigue que la vida humana sea esencialmente un drama
trágico, «una pasión inútil», en frase de Sartre. Es decir, una pieza de
teatro en la que las escenas se suceden de modo imprevisible sin
conexión causal entre los hechos, ya que nuestras decisiones «libres a
la fuerza» están entramadas y atrapadas en la contextura fatal del
destino.
Características diferenciales de los cinco
PRINCIPALES EXISTENCIALISTAS:Sören Kierkegaard*, Karl Jaspers*,Martin
.
Heidegger, Gabriel Marcel y Jean P. Sartre
• A. (A) S. Kierkegaard (1813-1855) es tenido por el pionero del
existencialismo. En reacción contra el idealismo extremo de
Hegel, y apoyado en el romanticismo de Schelling,
Kierkegaard pretende conducir al ser humano a vivir en
plenitud su existencia, la cual se realiza mediante una
decisión libre y por la fe con que se apoya en Dios. De este
modo se supera la angustia que el ser humano siente ante su
finitud y la experiencia de la nada.
• B) En posición cercana a la de Kierkegaard, K. Jaspers (1883-1969)
sostiene que, frente a la nada experimentada en la angustia, la
existencia se afirma mediante la decisión en favor de ser uno mismo.
Esa decisión se funda en la trascendencia que se manifiesta ante las
situaciones lí- mite. Cada individuo ha de realizarse desde él mismo
en su irrepetible situación histórica. Estas situaciones no pueden
superarse mediante conceptos formales; se necesita la
supraconceptual fe filosófica que sólo puede dirigirse a un Dios
ausente o escondido.
• (C) Heidegger (1889-1976) recibió el impacto de los dos anteriores, pero elaboró
por su cuenta muchos puntos del sistema existencialista. Para él, el ser se
entiende por medio de un análisis del tiempo, según expone especialmente en su
obra Sein und Zeit = Ser y Tiempo. La existencia es posibilidad, porque el ser
humano se halla ante un futuro abierto frente al cual siempre se siente en
proceso e incompleto, El ser está ahí, entre las cosas mundanas, con una
preocupación fundamental: la de conseguir su autenticidad, cosa imposible,
porque la inevitable preocupación por las cosas mundanas le hace sentirse caído,
perdiéndose a sí mismo. Para elevarse sobre esto, necesita la angustia, que le
presenta la nada como fundamento de todo ente a través de todo tiempo,
pasado, presente y futuro: (a) en el pasado, porque el «de dónde» permanece
oculto; (b) en el presente, por la futilidad de lo cotidiano; y (c) en el futuro,
porque de éste lo único cierto es que se precipita en la muerte.
• D) G. Marcel (1889-1973) es un existencialista francés,
teísta, que desarrolla sus ideas sin depender de
Kierkegaard ni de los alemanes Jaspers y Heidegger. Ante
el misterio de la existencia humana y de la libertad,
Marcel ve al hombre como fracturado y separado de su
propia vida. Pero vuelve a encontrarse a sí mismo, no por
la angustia y la preocupación heideggerianas, sino por la
adoración y la esperanza que encuentra rebasándose a sí
mismo en el recogimiento y la fidelidad, y apoyándose
en la trascendencia del tú divino.
• E) Finalmente, Sartre (1905-1980), también francés, pero
en el polo opuesto de Marcel, se apoya en Heidegger,
Husserl y Hegel. En realidad, lo que dije en los puntos (1),
(2) y (3), vale especialmente de Sartre, porque en él se
halla el existencialismo en toda su radicalidad. Según él, el
ser humano, libre a la fuerza, debe construir su propio
camino totalmente desamparado, sin Dios y sin norma,
condenado a aceptar la vida como una pesada carga. Es el
«ser roto por la nada, por el no-ser». La conciencia sólo le
sirve para percatarse de que «la vida es una pasión
inútil», un absurdo del cual le da testimonio la náusea
como experiencia fundamental de la existencia humana.
En la misma línea atea, se mueve el también francés
Maurice Merleau Ponty (1908-1961) aunque con rasgos
propios.
.También el cristiano se ve a sí mismo como un ser caído,
alienado, en busca de autenticidad, para dar sentido a la
vida, sintiéndose forastero en el mundo. Pero, por la
gracia de Dios, puede reencontrarse a sí mismo por fe
en el amor de Dios, con la esperanza segura de hallar
sentido en la vida, porque su destino no es un «ser para
la muerte», sino un «ser para la vida eterna». No hay
que angustiarse, no hay que preocuparse ni sentir
náusea de existir, sino echarse en los brazos de Dios con
humildad y arrepentimiento. El pasado está redimido
por el perdón, el presente está afirmado por la fe y el
futuro está asegurado por la promesa de un Dios que no
puede engañarse ni engañarnos.
El existencialismo yerra por su base filosófica,
porque, repito, la esencia precede a la
existencia como la potencia al acto (cf.
Existencia). Que la vida del hombre es un
«proyecto» es verdad en el sentido de que
Dios nos entrega la existencia para que la
realicemos en el tiempo, pero eso no es una
desgracia, sino una prueba de que nuestra
libertad no es forzada, sino verdadera, con
una grave responsabilidad por lo que significa
usar bien o mal del regalo que Dios ha puesto
en nuestras manos en esa suprema prueba
de confianza amorosa: «hazte lo que eres».
Para Dios, el ser humano nunca es un «objeto», sino un
ser digno de consideración y respeto. ¿Que la vida es un
drama? Concedido, pero sólo es una tragedia cuando el
hombre se aparta de Dios por el pecado, destruyéndose
a sí mismo en la perdición. Finalmente, el cristiano no es
un ser «aislado, sin norma ni rumbo», sino solidario de
otros, y con otros, en el Cuerpo de Cristo. Sólo el
inconverso puede sentir esa soledad, ese aislamiento,
esa falta de rumbo, pero eso es culpa suya, porque Dios
quiere que todos sean salvos y lleguen al conocimiento
de la verdad (1 Ti. 2:4).
Unidad III: Bultmann y Barth: Dos
concepciones de la teología
Karl Barth, 1886-1968, Suiza
Rudolf Karl Bultmann, 1884-
1976,Alemania

Vous aimerez peut-être aussi