ver con el método por medio del cual se gobierna el Estado. Si el método empleado en el gobierno del Estado implica la participación de los ciudadanos, entonces estamos en presencia de un Estado democrático; en cambio, si el método para gobernar el Estado, implica que no haya participación de los ciudadanos, entonces estamos en presencia de un Estado autocrático. Por otro lado, hay que tener en cuenta que tanto la democracia como la autocracia son solamente métodos diversos de gobierno del Estado; en tal sentido, debemos rechazar todas aquellas afirmaciones según las cuales la autocracia y la democracia se identifican con un contenido determinado. La democracia es un método de participación de los ciudadanos en el gobierno del Estado.
La democracia, en tanto forma de Estado, no
se identifica con ningún contenido en particular, pues sólo es un método de gobierno del Estado, es decir, un método de participación en la creación de las normas jurídicas estatales. La democracia está formada por dos elementos: la igualdad y la libertad.
Existen dos tipos de democracia: la
democracia directa y la democracia indirecta y representativa. A continuación vamos a analizar cada una de ellas. La democracia directa es aquella democracia en la cual los ciudadanos son los que gobiernan directamente el Estado.
En la democracia directa el ámbito de libertad
es muy amplio, pues en ella los ciudadanos gozan de amplias facultades deliberativas y decisorias, es decir, la voz y la voluntad del pueblo es la que decide en los Estados con democracia directa. El ejemplo más caracterizado de la democracia directa se dio en los llamados ciudades-Estados de la Grecia antigua. La democracia moderna es una democracia indirecta o representativa, pues la llamada democracia directa o de asamblea es cosa del pasado, cuya existencia únicamente fue posible en los Estados antiguos, fundamentalmente en las ciudades–Estados de la Grecia antigua, debido a que la extensión y la población de aquellos Estados eran muy reducidos. La democracia representativa es aquella democracia en la cual los ciudadanos no dirigen directamente por sí mismos los asuntos del Estado, sino que lo hacen por medio de representantes elegidos por ellos en elección popular.
La llamada democracia “representativa” no es
realimente representativa, pues los representantes no están jurídicamente obligados a hacer la voluntad de los representantes, esto es, del pueblo. La dinámica Parlamentaria, esto es, el funcionamiento del parlamento, con su técnica, con sus controversias dialécticas, discursos y replicas, argumentos y refutaciones tiende a la consecución de acuerdos, pactos y transacciones entre las diferentes agrupaciones políticas. Los parlamentarios elegidos por el pueblo no representan a éste, pues la representación implica que el representante realice la voluntad del representado, y esto es algo que generalmente no sucede en los llamados democracias representativas.
Pero la voluntad del pueblo está
imposibilitada de ser obedecida por el parlamento no sólo por lo señalado anteriormente, sino también debido a otra razón muy poderosa: por el principio de la división del trabajo. La democracia moderna necesita para su plena realización de los siguientes requisitos:
Pluralidad de partido políticos.
Respeto por las minorías. División de poderes. Instituciones de control. Existencia de los derechos de libertad. Alternancia en los cargos públicos. La democracia moderna descansa sobre los partidos políticos.
Las democracias genuinas son aquellas en las
que existe una pluralidad de partidos políticos. La democracia moderna debe contar con los mecanismos necesarios que aseguren la existencia de una pluralidad de partidos políticos.
Una democracia genuina debe garantizar que
ningún partido político tenga privilegios o monopolio.
Los Estados en los que existe un solo partido
político no son democracias, sino Estados autocráticos. La democracia se opone a todo poder absoluto, incluso el de la mayoría.
La democracia moderna es tal si en ella existe
un respeto y tolerancia por las minorías políticas, religiosas, económicas, etc. La teoría de la separación de poderes sostiene que el Estado está dividido en tres poderes: poder legislativo, poder ejecutivo y poder judicial.
La separación de los poderes es beneficiosa
para el régimen democrático, pues significa una disgregación del poder. El principio de legalidad: otorga garantías y seguridad a los ciudadanos, pues con él se hace previsible y determinable la actuación de los órganos estatales.
El Principio de publicidad: este principio
garantiza que determinados actos estatales sean realizados de una manera pública. La democracia significa cierta restricción al poder del Estado en relación con los individuos.
Este ámbito está plasmado en una serie de
derechos: libertad de conciencia, libertad de opinión, libertad de reunión y asociación, libertad de ciencia, etc. Todos estos derechos de libertad son inherentes a un Estado democrático. En la democracia los dirigentes ocupan sus cargos por un periodo determinado.
Esto permite que los individuos que ocupan
los cargos del Estado sean fiscalizados. La autocracia es un método que solo permite la participación del autócrata y de un grupo de hombres en el gobierno del Estado.
Entre las autocracias antiguas podemos
mencionar a la monarquía absoluta, la monarquía feudal y la monarquía estamentaria. Las principales autocracias modernas son el bolchevismo y el fascismo, esto es, las llamadas dictaduras de Partido. La dictadura de Partido es aquel Estado autocrático en el que domina totalmente un solo partido político.
En las dictaduras de partido todos los
ámbitos de poder están bajo el control del partido dominante, especialmente el Parlamento, en donde se pone buen cuidado en que ésta se halle constituida en todo o en su mayor parte por los miembros del Partido dominante. Otro rasgo característico de las dictaduras de Partido es que en estas quedan suprimidos las libertades y derechos fundamentales.
En las dictaduras de Partido también queda
abolida la independencia de los tribunales.
En las dictaduras de Partido la ciencia es
puesta al servicio incondicionado de los intereses del Poder público. Por otra parte, las dictaduras de Partido se instauran de dos formas: de forma legal o democrática y de forma revolucionaria o violenta.
En las dictaduras de partido son Estados en
las que las esferas de libertad de los hombres casi no existen, pues no hay ámbito en el cual el Estado no intervenga. El fascismo y el bolchevismo son las dos formas más caracterizadas de las llamadas dictaduras de Partido.
El bolchevismo es una dictadura que defiende
los intereses del Proletariado.
El fascismo viene a ser la dictadura de un
partido burgués. Tanto el bolchevismo como el fascismo son enemigos de la democracia.
El bolchevismo enarbola la idea del
internacionalismo revolucionario; en cambio, el fascismo enarbola la bandera del nacionalismo.
Tanto el bolchevismo como el fascismo,
como autenticas autocracias que son, rinden culto a la personalidad del Caudillo. Otra característica del bolchevismo y el fascismo es que tienen a uniformar intelectual y culturalmente a los individuos.
Mientras el fascismo tiene a la religión como
uno de sus instrumentos de integración de la nación, en cambio, el bolchevismo tiende a considerar a la religión como un opio de los pueblos.
Finalmente hay que señalar que el fascismo y
el bolchevismo se identifican con sistemas económicos diferentes. GRACIAS