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Equito 4:
Uriel Sosa Pedraza
Manuel Alejandro Velázquez Torres
La primera carta es un tipo de reflexión, en el que el autor le dirige a su hija lo
siguiente:
Habla sobre la importancia que tiene el escoger una profesión, que te ofrezca la
posibilidad de realizarte en plenitud, la cual es la llave para ser un profesional de
excelencia, sin embargo, existe el otro punto en el cual no se analiza a lo que uno
se quiere dedicar profesionalmente y esto conlleva a la mediocridad profesional.
Otro punto importante que menciona el autor, para conocer y adentrarnos en la
elección de una profesión, son las dudas, ya que de ellas, surgen preguntas y a
cada pregunta que nos auto formulemos, obtendremos mayor seguridad y
conocimiento.
Sabias palabras de el Quijote: “La libertad, es uno de los más preciados dones que a
los hombres dieron los cielos: con ella no pueden igualarse los tesoros que tiene la
tierra, ni el mar incubre. Por la libertad, así como por la honra se puede aventurar la
vida.
Pero por esa libertad, y con esa libertad, tienes que tomar en cuenta que
enfrentaras.
El autor en esta carta hace énfasis en la ética profesional
A.M. Wellington (1887): sería bueno que la ingeniería fuese menos generalmente
considerada, en incluso definida, como el arte de construir. En cierto e importante
sentido es incluso el arte de no construir; o, para definirla ruda pero no impropiamente,
es el arte de hacer bien con un dólar lo que cualquier chambón puede hacer, en cierto
modo, con dos.
Henry G. Scott (1907): ingeniería es el arte de organizar y dirigir hombres y controlar las
fuerzas y materiales de la naturaleza para el beneficio de la raza humana.
Como se puede dar uno cuenta, no existe una definición como tal de que es la
ingeniería ya que esta se puede mezclar con todo en pequeñas proporciones.
El autor también nos comenta que muchas de las personas que no eligen una
carrera relacionada con alguna ingeniería es debido a que tiene como medios de
estudio a las ciencias como las matemáticas, física o química, huyendo de estas
debido a que les resultaron difíciles en el transito escolar, olvidándose de lo
primordial de la ingeniería: la atención de las necesidades; como ejemplo están la
rueda, la pólvora o la imprenta
El México de hoy requiere de ingenieros comprometidos con su patria y
entregados al bien común.
Se reitera que el ejercicio de la profesión se debe encontrar el equilibrio entre el
beneficio material y la satisfacción moral que da el trabajo.
Este capitulo contrasta los pasados de los logros de la ingeniera mexicana con la
actualidad y advierte la pobreza en las que nos veremos inmersos de no invertir en
el presente inmediato de incrementar nuestra capacidad tecnológica y fortalecer
nuestra ingeniera.