LENGUAJES EN EL M. FIERRO JOSEFINA LUDMER EL GÉNERO GAUCHESCO tiene dos cadenas de uso y dos límites
LAS LEYES LAS GUERRAS
Ilegalidad popular, Segundo límite es la revolución y la guerra de Delincuencia campesina la independencia que abren la práctica del uso Desposeídos- ley de vagos/ militar del gaucho y su des-marginalización Ley de leva Cadena de usos: a)utilización del delincuente Delincuencia=efecto de la gaucho por el ejército patriota Diferencia de dos ordenamientos b) utilización de su registro oral (voz) por la Jurídicos cultura letrada =género gauchesco Necesidad de uso=mano de obra c) utilización del género para integrar a los Para los hacendados y soldados gauchos a la ley ‘civilizada’ (liberal y estatal) Para el ejército VOZ Y LEY CADENA CIRCULAR que se abre con Hidalgo y cierra con M Fierro. VOZ Y LEY se modulan desde el ejército y la guerra al estado nacional: este pasaje es la historia del género, de la delincuencia y la civilización, del cuerpo del gaucho por el ejército y el uso de su voz por la cultura letrada que define al género. Pasaje de dos campos: el campo del gaucho al campo de batalla, ahí surge la voz ficticia de la literatura gauchesca a cargo del gaucho cantor y patriota. El gaucho puede ‘cantar’ o ‘hablar’ para todos en verso porque lucha en los ejércitos de la patria, su derecho se asienta en las armas, y el trasplante de la oralidad/escritura, hipercodificada y esa voz se hace poesía escrita, se transforma en signo literario, se disciplina. Dos instituciones se complementan ejército y poesía Dos armas en las cadenas del género: VOZ LEY/VOZ ARMA LEÓNIDAS LAMBORGHINI El gaucho deja de deambular y se planta a cantar para que lo escuchemos. El canto será la argucia del corazón pero también su territorio: el de la facultá de fundar y sostener el Poema allí recae su destino: ser incluido en la sociedad que injustamente lo margina. El canto=relación empática con el auditorio. Tipos de canto: primera, quejosa; como consuelo, plegaria, desafío, magia y compasión El MF es un canto de doble exilio, uno interno por esa sociedad que lo marginaba y la vida entre los indios que lo aceptan pero no son aceptados por él. Fierro se presenta como un sujeto irreparablemente escindido y por eso será un exiliado en cualquier parte. La Vuelta En la Vuelta a pesar de tantas pérdidas se ha conservado el Canto ni ‘la voz de cantor’, agradecimiento divino e historia del despojo revelan que no hay canto sin memoria. La memoria como necesidad del olvido (de todo lo malo) Simulación y actitud bufonesca
Canta el pueblero…Y es pueta;
Canta el gaucho…Y ¡ay, Jesús! Lo miran como avestruz, Su inorancia los asombra; Mas siempre sirven las sombras Para distinguir la luz El canto como contrapunto de la voz de Cruz y Fierro de la aventura al destino futuro Más que yo y cuantos me oigan, más que las cosas que tratan, más lo que ellos relatan, mis cantos han de durar; mucho ha habido que mascar Para echar esta bravata Plena conciencia del genio poético y dominio de su arte para Hernández Inconformismo de la circulación masiva del poema y relevamiento del plus poético que aseguraba su perdurabilidad. Reconocimiento del Parnaso literario, la bufonada se logra en que esta ‘bravata mascada’ muestre su gloria. “José Hernández y el Martín Fierro: El canto y la bravata”. RAÚL DORRA El protagonismo de la voz que va desde al memoria oral- traducciones y lecturas del MF, RESPONDE A AFIRMAR UN CREDO, ONTOLIGIZAR LA MISMIDAD. Se pasó así de una mímesis espontánea a una mímesis programática. Luego se hicieron folklore e institución señal de una identidad querida o decretada, más que adquirida y también demagogia patriotera. Por eso el extremo sea el ejercicio de la mímesis se transforme en el repliegue crítico en forma de parodia. Por ejemplo las aventuras del gaucho Inodoro Pereyra de Fontanarrosa pone en crisis cierto folklore nacional en tanto ‘continuidad cultural’, es una forma de hacer resonar la voz -aquella voz- en su doble deformado. Como todo humorismo hay una quiebra de fondo, un temblor, una crispación que se introduce en la risa como metalectura de la original voz de Fierro. HISTORIETAS DE INODORO PEREYRA REDES TEXTUALES LA REFALOSA, ASCASUBI--- La primera fiesta del monstruo. Lengua del mal, asesina y brutal. Horror corporal y escándalo verbal del género. Literatura de la tortura donde se amputan y matan los cuerpos. Doble uso del gaucho soldado y gacetero, mazorquero y degollador. Doble utilización del cuerpo de los gauchos: económica, policial y criminal EL MATADERO juega con el salto genérico, el gran desafío del monstruo al animalizar al otro EL FIORD- La fiesta orgiástica. Letra y carne que forman texto de las letras argentinas, a las que se sacude desde lo que habla sin parar, lo interdicto, lo no descriptible: terror, salvajismo, lo no - humano de la humanidad, no la fiesta sino la "fiestonga del garchar" GUARAGNO, Liliana. “Acerca de El Fiord, de Osvaldo Lamborghini”. LA FIESTA DEL MONSTRUO, Borges y Bioy Casares RIZOMAS DE LA VIOLENCIA: REDES DE SENTIDO Salvajismo: los salvajes=indios para los gauchos, Rosas cambia la dirección semántica hacia la política “salvajes unitarios” que son ateos e infieles como los indios. La fiesta espacio ideal del uso de los cuerpos
y además el espacio de alianza militar,
económica, política, policial y sexual. Rosas/ Perón APORTES COMPARATIVOS Revista “Literal”; Luis Gusman, Germán García, y Lamborghini, entre otros. Sus libros (El Frasquito, Nina y El Fiord , respectivamente) sirven de muestra de esta nueva tendencia, reconociéndoseles como rasgo común de ella a la sexualización de la escritura. En sus obras afrontan la narración de los cuerpos desde una escritura erótica sumamente combativa la cual se cruza con el discurso y con la acción política. Sus creaciones buscan poner al descubierto, precisamente, lo que oculta la ideología: un poder salvaje y desnudo de un cuerpo sobre otro por medio de una escritura erótica que también revela el poder de los signos sobre los cuerpos y las cosas. “no se escribe sobre los cuerpos, sino que se inscribe en los cuerpos” PERLONGHER, Néstor (…): “Ondas en El Fiord. Barroco y corporalidad en Osvaldo Lombarghini”. Ponencia. Facultad de Letras. UBA.