Asertividad

Equipo 3

De la O Franco Lucero Yareli

Hernández Calva Jorge Andrés
Ibarra Delgado José Alberto
Portuguéz Anaya Juan Carlos
Rodríguez Zárate Isaac Emmanuel
Ruíz Rosales Luis Yair
Sánchez Díaz Veronika
Podemos encontrar diferentes definiciones de asertividad,
entre las cuales destacaría las siguientes:

» Kelly (1982): La capacidad de un individuo para transmitir a

otra persona sus opiniones, creencias o sentimientos de
manera eficaz y sin sentirse incómodo.

» Fensterheim (1990): La persona realmente asertiva se siente

libre para manifestarse, puede comunicarse de forma
abierta, directa, franca y adecuada, su orientación ante la
vida es activa y ante distintas situaciones conserva su
autorrespeto.
» Mézerville (2004): El concepto de
autoafirmación se caracteriza por la capacidad
que tiene la persona de expresar abiertamente
sus deseos, pensamientos o habilidades y la
define como la libertad de ser uno o una misma
y poder conducirse con autonomía y madurez.
Lo contrario a la autoafirmación implicaría
inhibirse o anularse.
Tenemos 3 modos
para enfrentar la
comunicación: con
asertividad, con
pasividad y con
agresividad.
» Escucha activa, que comprende escuchar
con atención al exponente, para lo cual
debemos dar muestras mediante lenguaje
verbal y no verbal de nuestro interés por lo
que se está diciendo.

» Decir lo que uno piensa, es decir, tratar de

dar nuestra opinión. Expresiones como “sin
embargo” y “no obstante” tienden a servir
cómo tránsito en la conversación.

» Mostrar nuestros deseos, lo que buscamos

obtener de una manera clara y concisa.
» Lenguaje corporal. La comunicación no
verbal de las personas asertivas se caracteriza
principalmente por mantener una postura
reflejada, firme y cómoda. El contacto físico y
el ocular se emplean de forma adecuada a
cada momento y en todo momento se
práctica la escucha activa.

» Diálogos interiores. Las personas que

tienden a generar un monólogo interior
positivo refuerzan sus actitudes y el
reconocimiento de los logros. Los
pensamientos negativos tienden a rezagar el
comportamiento asertivo.
» Fogging o banco de niebla.
» Interrogación negativa.
» Asertividad negativo.
» Ironía asertiva.
» El disco rayado.
» El acuerdo viable
» Aplazamiento asertivo.
» Libre información o información gratuita.
» Autorrevelación.
» Autorrevelación.
» Aserción básica. Se le conoce como el primer grado
de aserción y es la forma en la que nos damos a
conocer de forma simple y clara nuestra opinión. A
la vez, implica la defensa de los derechos
personales, opiniones y expresiones.
» Aserción empática. Este tipo de aserción implica
transmitir a nuestro escuchador nuestra propia
opinión sin renunciar a nuestros derechos. De esta
forma, predisponemos positivamente a nuestro
interlocutor. De igual forma, se puede usar como
una estrategia dilatoria, para poder reorganizar
nuestras ideas.
» Asertividad escalonada. En ocasiones no bastará con
una sola afirmación para que nuestro interlocutor
respete nuestras opiniones, si no que habremos de
intensificar de manera escalonada nuestra postura
asertiva. En caso de que esta técnica no funcione, se
puede recurrir a una negociación en la que se respeten
las posturas.

» Aserción de confrontación. Tipo de aserción utilizado

cuando se reciben mensajes contradictorios. Existen
situaciones en las que el interlocutor contradice los
hechos con sus palabras, o desliza afirmaciones que se
contradicen con otras expresadas anteriormente; es el
momento de clarificar la situación para evitar
confrontaciones.
» Aserción subjetiva o del lenguaje del yo.

Es un tipo de aserción que permite expresar

sentimientos negativos sin tener que mostrarnos
agresivos y sin que la relación se resienta
demasiado por ello. Es utilizado cuando se
produce una agresión de forma inconsciente por
parte del interlocutor o en aquellas situaciones en
las que se viene repitiendo de forma parecida.
» Permite tener una mayor sensación de control
sobre el entorno y sobre nosotros mismos.
» Permite tener control sobre uno mismo y poner
límites mejora la autoestima.
» Como la asertividad no busca el conflicto, mejora la
comunicación de una forma eficiente y por lo tanto,
empodera a la persona,
» Mejora el bienestar y la satisfacción vital para
poder vivir situaciones y experiencias más
gratificantes.
» Mejora la comunicación entre los actores de una
relación.
» Provoca una mejora en las relaciones interpersonales
que es fruto de una mejor comunicación, honestidad y
sinceridad.
» Mejora el autoconocimiento y la gestión emocional.
» Permite resolver conflictos y evitar que los problemas
se magnifiquen fruto de la no expresión de las
necesidades y las emociones de uno mismo.
“Tanto la autoestima como la asertividad
son habilidades con las que no se nace sino
que se aprenden, por lo tanto, en cualquier
momento se pueden adquirir.”
Se sabe que una persona asertiva tiene las
siguientes características:

• Sabe decir “No“ o sabe mostrar su postura hacia algo

• Sabe realizar peticiones

• Se autoafirma

• Resuelve conflictos de forma que se respeten ambas partes

• Reacciona con autoestima ante las críticas

• Emite críticas de manera respetuosa

• Negocia acuerdos

• Sabe expresar sentimientos.

Pensamientos Conductas

Sentimientos
• mejorar la asertividad
• nos mejoran emocionalmente
• nos harán sentirnos respetados
• respetaremos a los demás
 PENSAMIENTO
Un pensamiento no asertivo involucra sobrevalorar la opinión
de los demás en conjunto con la propia creyendo que no son
suficientes, temiendo al resultado.

“Van a pensar que soy un…” “Si lo digo me van a rechazar…”

“Si muestro quien soy, quedare mal”

El pensamiento se puede convertir en asertivo teniendo
presente que una opinión propia es tan importante
como la de todos

de esta forma aprendemos a:

Escuchar Opinar

No quedarse callado con inconformidades

 Los sentimientos no asertivos aparecen cuando
los propios sentimientos de la personas dependan
de la opinión de los demás.

Generan:
desesperación
miedo

vulnerabilidad

inseguridad rabia
ira
Trabajar en la autoestima, la parte de
valoración propia, hace que no se
dependan de estos sentimientos de
rechazo propio, librándonos del “que
dirán” trayendo paz interior, seguridad,
coherencia entre otras cosas.
Las conductas no asertivas se dividen en dos ramas las
cuales son:

• Sumisas: Hacen depender del otro, callando la mayoría

de las veces nuestro pensar.

• Agresivas: Buscan imponer, abusar e incluso faltar al

respeto en busca de la atención.
Una conducta asertiva

• trabajar en el respeto propio

• alzar la voz

• saber decir que “no”

Reemplaza tus pensamientos negativos

“Soy una mala persona

por que…”

“No soy monedita de oro

para caerle bien a todos”.

No puedes cambiar tus emociones, pero

sí la forma en que las interpretas.
Comprende que la gente no puede leerte la
mente
Un gran y clásico error de la gente pasiva es suponer que la gente
sabe qué está ocurriendo en tu interior.
No sabemos lo que las personas quieren como tal, sus
especificaciones y exigencias si no saben expresarlas o no
sabemos hacerlo nosotros tampoco.
Defiende “tu” verdad, no “la” verdad
Hablar de forma asertiva no transforma tu
mensaje en la única verdad, pero sí que lo
transforma en tu verdad.

Recuerda tu objetivo pase lo que pase

Para ser asertivo no debes exponer tan sólo las
situaciones, también debes dejar muy claro lo
que quieres
Sé siempre lo más concreto que puedas
Debes ser capaz de transmitir exacta y
detalladamente lo que quieres y no una vaga
idea general

Haz referencia a los hechos y no a tus

juicios
Hecho objetivo: “Tu resultado tiene una
variación debido a que planteaste mal el
problema y confundiste datos en el
procedimiento”

Tu conclusión: “Tu problema está mal”

Añade motivos a lo que pides
Es una excelente forma de reducir las probabilidades
de que te rechacen porque tu interlocutor verá que hay
un razón real que sustenta tu petición, y que no es un
capricho tuyo.

Habla desde “ti” y no desde “tú”

Utilizar la palabra “Tú” en tus argumentos puede
interpretarse fácilmente como una acusación y
entonces, como mecanismo de auto-protección,
la gente se cierra y se distancia.
 Contagia tus emociones
Los mensajes referidos al “Yo” son muy
difíciles de discutir porque siempre irán
seguidos de una emoción o sensación,
y nadie te podrá discutir nunca cómo te
sientes.

Reduce tu ansiedad con el lenguaje corporal

El lenguaje corporal juega un papel muy importante
en la comunicación ya que expresa alrededor del 80%
de lo que queremos decir en realidad.
Aquí presentamos las habilidades específicas para cuatro
tipos de situaciones que resultan difíciles para muchas
personas en las que se puede aplicar la asertividad:

• asertividad intrapersonal

• respuesta ante críticas

• realización de peticiones

• expresión de sentimientos.
 Asertividad Interpersonal

Muchas personas tienen serios problemas de

funcionamiento porque uno o ambos miembros se
comportan siguiendo modelos agresivos o sumisos que
provocan en las otras respuestas inadecuadas, dando lugar
al consiguiente desajuste personal y emocional de uno o
ambos.
Es más apropiado hacer una petición que una
demanda.

“¿Podrías ponerme
atención por favor?” que
decir “! Ponme atención ¡”

Es mejor hacer preguntas que

acusaciones.
“¿me estás escuchando?” que “¡otra
vez no me estás escuchando!”
Al criticar a la otra persona, hablar de lo que hace,
no delo que es.
“No pasaste el examen porque te faltó
estudiar” a decir “No pasaste el examen
por tonto”.

No ir acumulando emociones negativas

sin comunicarlas
Esto podría producir un estallido que
conduciría a una hostilidad destructiva
Discutir los temas de uno en uno.
Aprovechar estar discutiendo sobre un tema en
específico para incluir más, se debe concluir con una
discusión a la vez

Evitar las generalizaciones

“últimamente estas insoportable” a decir “Siempre
eres insoportable”

No guiarse por una excesiva sinceridad.

Guardar un poco de sinceridad viene bien.

La comunicación verbal debe de ir acorde

con la no verbal.
No es lo mismo decirle a alguien un
comentario de aceptación con un rostro o
ademanes que reflejen rechazo o
incomodidad que expresarse con la el
mismo sentimiento o emoción.
Interpretar correctamente
Se debe analizar la crítica de manera
objetiva en la que le parezca que está
siendo criticada.

Evaluar
Se debe analizar cuándo una crítica está
siendo emitida con mala voluntad y
cuándo se trata de una “crítica
constructiva”.
Tono
El tono de la respuesta a una crítica
tiene que ser lo más neutro y
aséptico posible.
Una última cosa importante a la
hora de responder y manejar una
crítica es el hecho de:

• Reconocer (Tienes razón)

• Repetir (Tendría que haber

hecho...)

• Explicar (No lo hice porque...)

Lo más importante es
que, previamente, la persona se
“prepare” para la situación,
teniendo claro qué es lo que
quiere, cómo lo quiere, etc. y
evaluando cuál es el mejor
momento para sí mismo y para el
otro.
• Igual de importante que es saber defenderse, demandar y reclamar,
así también es de vital importancia el expresar sentimientos.

• Acostúmbrate a formar frases que comiencen por:

• “quiero”... o “me gusta...”, “no me gusta...”, “me siento...”, etc.

• Intenta comprobar el significado o los sentimientos que subyacen a los

comentarios del otro: “¿Sentías que te criticaba cuando dije...?”.

• No dejes pasar situaciones confusas sin clarificarlas. Si algo te ha

sorprendido, alarmado, etc. pide aclaración inmediatamente.

• Acostúmbrate a utilizar frases reforzantes para el otro. Si algo te

ha gustado, házselo saber

• Como alternativa a estallar en ira ante una controversia, apréndete de

memoria estas frases: “Estoy enfadado porque......”, “Me gustaría
que......”
Por último los temas en resumen en lo que se puede
aplicar la asertividad en nuestras vidas vienen siendo:
Identifica los falsos esquemas:

• Descubre tus necesidades

• Pide lo que necesites, exprésate.
• Toma tus propias decisiones.
• Acepta la crítica y también los elogios
• Reconoce tus virtudes y tus defectos
• Acepta los errores
• Expresa afecto, respeta a los demás sin dejar de respetarte.
• Defiende tus derechos.