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Luis Alberto Borrero

Hugo Daniel Yacobaccio

Etnoarqueología de asentamientos Aché [Cazadores-


recolectores del Paraguay oriental]
In: Journal de la Société des Américanistes. Tome 75, 1989. pp. 7-33.

Abstract
Ethnoarchaeology of Ache settlements. Hunting-gatherers of Eastern Paraguay.There is a growing interest in archaeology for
studying human behavior in contemporary societies with the purpose of formulating theoretical models to aid in explaining certain
archaeological data. The aim of this paper is to elaborate hypotheses having a degree of causality concerning the process of
formation of small archaeological sites in hunting- gathering societies. In order to accomplish this goal we studied a community of
Aché foragers in Eastern Paraguay with three types of settlement types : transient camps, central camps and semi-permanent
camps.

Resumen
En arqueología hay un creciente interés en estudiar las sociedades actuates con el fin de obtener enunciados teóricos que
vinculen el comportamiento humano con sus consecuencias arqueológicas. El objetivo general de este trabajo es formulář
hipótesis con cierto grado de causalidad acerca de los procesos de formation de sition pequenos en sociedades de cazadores-
recolectores. Para esto se estudió una comunidad de cazadores Aché del Paraguay oriental con très tipos de asentamientos :
campamentos transitorios, campamentos centrales y campamentos semi-permanentes.

Résumé
Ethnoarchéologie de l'habitat Aché. Chasseurs-collecteurs du Paraguay Oriental.Il existe un intérêt croissant, en archéologie,
pour l'étude des sociétés actuelles afin d'établir des modèles théoriques qui pourraient aider à expliquer certaines données
archéologiques. Le propos de cet article est d'élaborer des hypothèses, avec un certain degré de causalité, concernant le
processus de formation des sites archéologiques dans les sociétés de chasseurs-collecteurs. À cette fin, les auteurs ont étudié
une communauté de chasseurs du Paraguay Orientale, les Aché, qui ont trois types d'habitat : campements transitoires,
campements centraux et campements semi-permanents.

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Borrero Luis Alberto, Yacobaccio Hugo Daniel. Etnoarqueología de asentamientos Aché [Cazadores-recolectores del Paraguay
oriental]. In: Journal de la Société des Américanistes. Tome 75, 1989. pp. 7-33.

doi : 10.3406/jsa.1989.1341

http://www.persee.fr/web/revues/home/prescript/article/jsa_0037-9174_1989_num_75_1_1341
ETNOARQUEOLOGÍA DE ASENTAMIENTOS ACHÉ

Cazadores-recolectores del Paraguay oriental

Luis Alberto BORRERO*


Hugo Daniel YACOBACCIO**

En arqueología hay un creciente interés en estudiar las sociedades actuates con el fin de
obtener enunciados teóricos que vinculen el comportamiento humano con sus consecuencias
arqueológicas. El objetivo general de este trabajo es formulář hipótesis con cierto grado de
causalidad acerca de los procesos de formation de sition pequenos en sociedades de
cazadores-recolectores. Para esto se estudió una comunidad de cazadores Aché del Paraguay
oriental con très tipos de asentamientos : campamentos transitorios, campamentos centrales
y campamentos semi-permanentes.

Ethnoarchaeology of Ache settlements. Hunting-gatherers of Eastern Paraguay.

There is a growing interest in archaeology for studying human behavior in contemporary


societies with the purpose of formulating theoretical models to aid in explaining certain
archaeological data. The aim of this paper is to elaborate hypotheses having a degree of
causality concerning the process of formation of small archaeological sites in hunting-
gathering societies. In order to accomplish this goal we studied a community of Aché
foragers in Eastern Paraguay with three types of settlement types : transient camps, central
camps and semi-permanent camps.

Ethnoarchéologie de l'habitat Aché. Chasseurs-collecteurs du Paraguay Oriental.

Il existe un intérêt croissant, en archéologie, pour l'étude des sociétés actuelles afin
d'établir des modèles théoriques qui pourraient aider à expliquer certaines données
archéologiques. Le propos de cet article est d'élaborer des hypothèses, avec un certain degré
de causalité, concernant le processus de formation des sites archéologiques dans les sociétés
de chasseurs-collecteurs. À cette fin, les auteurs ont étudié une communauté de chasseurs du
Paraguay Orientale, les Aché, qui ont trois types d'habitat : campements transitoires,
campements centraux et campements semi-permanents.

* Conicet, Buenos Aires.


** Instituto de Ciencias Antropológicas, Buenos Aires.

J.S.A. 1989, LXXV : p. 7 à 33.


SOCIÉTÉ DES AMÉRICANISTES

INTRODUCCIÓN

La etnoarqueologia estudia el comportamiento social contemporáneo desde


una perspectiva arqueológica. Asi es que busca producir enunciados significativos
acerca de la relación entre taies comportamientos y la formation de residuos
materiales. De esta manera provee una base empirica adecuada para la construc
tion de enunciados, que involucren relaciones causales, a partir del sistema
dinámico — el comportamiento — en relación a su efecto estático — el registro
arqueológico.
Desde háce algunos aňos los arqueológicos se dieron cuenta de que el estudio
de las sociedades vivientes pódia arrojar luz acerca del funcionamiento de las
sociedades del pasado (ver Ascher 1968). En ese momento es publicado el libro
Man the Hunter (Lee & DeVore 1968), en el cual, además de un cúmulo de
trabajos significativos sobre grupos de cazadores-recolectores actuales, se plantea
la necesidad de considerar el registro de hoy en dia para construir modelos e
hipótesis provechosas para la evaluation de la dinámica de las sociedades de
cazadores-recolectores prehistóricas (Binford 1968).
Más alla de una discusión metodológica detallada sobre el empleo de la
information actualistica y su relevancia explicativa (ver Bettinger 1987), considera-
mos que una de las formas adecuadas para explicar el pasado es evaluar el
présente. El registro arqueológico, рог su propia naturaleza, es estático —
conformado por artefactós, ecofactos y estructuras dentro de una matriz espacio-
temporal determinada. Los patrones establecidos tradicionalmente por los arqueo-
lógos a partir de generalizaciones sobre datos empiricos — récurrentes o anó-
malos — no explican el pasado, sino que lo describen, estableciendo regularidades
o diferencias espaciales o temporales según cada caso.
Si nuestro objetivo es conocer las sociedades del pasado y no solo como lucian,
taies patrones deben, a su vez, ser explicados; es decir, debemos dotarlos de
significado. De esta manera se háce necesario salvar el eslabón de la estática —
registro arqueológico — hacia la dinámica — funcionamiento de las sociedades del
pasado. Por lo tanto la construction de modelos dinámicos del compartamiento
humano es crucial en este sentido.
El estudio de las sociedades actuales, entonces, desde un punto de vista
arqueológico, constituye el nudo de la cuestión al establecer causas que expliquen
la formation del registro arqueológico. El análisis etnoarqueologíco proporciona,
asi, modelos e hipótesis adecuadas para ser contrastadas con el registro
arqueológico y salvar et « salto de rana » de la explication inductiva usual
(Tringham 1978).
Es nuestra intention, al estudiar la comunidad Aché, la de formulář hipótesis
con cierto grado de causalidad, acerca de los procesos de formation de sitios
pequenos en sociedades de cazadores-recolectores. La relevancia, además, esta
dada en caracteristicas particulares taies como : (a) el apurado proceso de cambio
social — y económico — que se desarrolla ante nuestro ojos entre los Aché, y que
nos impulsa a presentar nuestras observaciones ; (b) desde un punto de vista
global, el ambiente donde los Aché viven esta poco explorado arqueológica y
ETN0ARQUEOL0GÍA DE ASENTAMIENTOS ACHÉ 9

etnoarqueólogicamente. Es decir, que el estudio de los Aché es de relevancia, en


relation al comportamiento de grupos de cazadores-recolectores en ambientes
tropicales.
La creciente literatura etnoarqueológica acerca de cazadores-recolectors surge
de sociedades que habitan en amtas latitudes (Binford 1978a, 1978b; Binford y
O'Connell 1984 ; Gould 1971, 1980 ; O'Connel et al 1983 ; Yellen 1977), con pocos
ejemplos de sociedades que viven en bajas latitudes (Fisher 1986; O'Connell et al.
1987; Pookajorn 1986). Por esta razón, el estudio de los Aché, desde esta
perspectiva, aunque orientado a un problema particular — la formation de sitios
pequenos — contribuirá a renriquecer la information existente sobre la variabili-
dad del comportamiento en grupos de cazadores-recolectores.
Las prospeccciones etnoarqueológicas fueron realizadas en Chupa Pou y
alrededores (Departamento de Canendiyu, Paraguay oriental) en 1984, y durante
las mismas se recolectaron informaciones relacionadas con el sistema de asenta-
mientos Aché. Para esto se realizaron mapas a escala de cada uno de los
campamentos visitados, y la atención se centré en la distribution de estructuras,
artefactos y ecofactos, la formation de basurales y lo localization de las chozas. Se
visitaron campamentos abandonados y activos.

LOS ACHÉ

Los Aché se dividen, al menos, en très grupos (Hill y Hawkes 1983 : 142), los
cuales hablan una lengua de la familia Guarani. Hasta el momento fueron
realizados importantes trabajos etnográficos tanto entre los grupos del Sur —
Yvytyruzu Aché e Ynaro Aché — (Clastres 1972a, 1972b) como entre los del
Nořte — Curuguaty Aché — (Hill 1983 ; Hill y Hawkes 1983 ; Hawkes et al 1982).
Nuestro trabajo se desarrolló entre los Aché del Norte. Este grupo esta
actualmente centrado en la Mission del Verbo Divino de Chupa Pou, en las selvas
del este de Paraguay (Figura 1). Chupa Pou se fundó en septiembre de 1978, con
un grupo de Aché del Norte que vivia desde 1975 en Arroyo Manduvi. Se trata del
mayor grupo de Aché del Norte existente en estos momentos (Hill 1983).
La caracteristica distintiva de los Aché con respecto a otros grupos indigenas
de la zona es su alta movilidad, la que fue destacada desde las primeras
descripciones conocidas (resumen en Métraux y Baldus 1963). Hasta tiempos muy
recientes los grupos de Aché del Norte se movian continuamente utilizando cada
campamento raramente por más de uno о dos dias. Asociado con esta alta
movilidad esta el hecho de que no existe almacenamiento de alimentos, los que
usualmente son consumidos dentro de las 24 horas de adquiridos (Kaplan y Hill
1985 :228).
10 SOCIÉTÉ DES AMÉRICANISTES

Figura 1. — Localization de Chupa Pou en Paraguay Oriental.

CAMPAMENTOS

Campamentos trasitorios.

Son abundantes las evidencias de movimientos de grupos Aché que se


caracterizan por utilizar cada campamento no más de uno o dos dias (Clastres
1972a; Hill y Hawkes 1983; Jones 1983; Vellard 1934 : 231 ; Crecencia Carisimo,
com. pers. ; Silvia Kahel, com. pers.), y por esa razón constituyen análogos idéales
para estudiar los procesos de formation de sitios pequenos. En la Figura 2 se
dibujan esquemáticamente las plantas de algunos campamentos Aché de esas
caracteristicas tomadas de la literatura, y también las que documentâmes
personalmente. Se observa que la estructura más importante es el fogón. En
algunos casos se instalan chozas, las que estructuralmente son semejantes a las
descriptas más abajo, pero esto es dependiente principalmente de las condiciones
meteorológicas (lluvia).
Desde el punto de vista arqueológico las evidencias depositadas en tal tipo de
sitios son minimas. , Afún si hacemos abstraección del hecho de que toda la
Figura 2. — Campamentos mapeados рог (A) Jones (1983 : Fig. 2) y (B) Vellard (1934 : Fig. 20).
12 SOCIÉTÉ DES AMÉRICANISTES

situation ocurre en ambientes tropicales, en los que muy pocos materiales se


preservan arqueológicamente, vemos que es muy escaso lo que queda para el
arqueólogo. Las cenizas del fogón, algunos lenoš, y huesos de animales
distribuídos más o menos azarosamente es lo que caracteriza a estos sitios. Los
artefactos que pueden descartarse en tal tipo de sitios son los raspadores hechos
con caracoles Strophocheilus, los que pueden atestiguar el trabajo de la maděra. Es
improbable que se descarte algun otro tipo de artefacto, excepto que esté roto,
debido a que hay una conducta de conservation de los mismos (arcos, fléchas,
« mochilas », etc.).

Tabla 1.

20' 2.5
15' 2.5 1.5 2.9
Jones * 2.0 2.3 2.3 2.3 2.1 2.5
Vellard 3.1 3.6 4.4 3.5 3.9

* incluye el fogón utilizado por los antropólogos. Distancias entre fogones de cuatro campamentos
Aché.

En la Tabla 1 se présenta information acerca de las distancias entre fogones


para cuatro campamentos Aché. Una prueba de chi cuadrado efectuada sobre los
datos de dicha Tabla mostró que no hay ninguna covariation entre el numero y la
proximidad de fogones contiguos (x2 = 0.465 p = n.s. ; el resultado, además, del
test Q de Yule muestra la baja relation entre las variables, Q = 0.42). La
discussion de estos resultados se desarrollará más adelante, en el punto Implica-
ciones arqueológicas.
El hecho de ser cazadores-recolectores en un ambiente selvático requière alta
movilidad debido a la distribution y estructura de las especies animales présentes.
Sobre las 41 especies más comunes, el 39 % son de pequefio tamano (5 Kg о
menos) ; el 54 % tienen hábitos solitarios ; el 73 % tienen hábitos nocturnos y el
44 % son arbóreas. Sólo el pecan {Tayassu pecarî) de tamano grande (30 Kg) es de
hábitos sociales (manadas de 50-100 individuos) pero altamente móvil en una
extensa area de alimentation, por lo que su aparición en un locus determinado es
infrecuente, irregular y brève (Sponsel 1986 : 76). Otros grupos de cazadores,
como los Akuriyo, Héto y Maku, de Amazonia Noroccidental, confirman esta
correlation con su alta movilidad (Sponsel 1986 : 74-75). Este patron móvil se ve
reflejado entre los Aché en el alto costo energético de horas-hombre gastadas en el
tiempo de búsqueda de las presas en relation al tiempo de persecution (Hill y
Hawkes 1983 : Tabla 5A).

Campamentos centrales.

Se visitaron dos campamentos centrales, uno abandonado (Figura 3) y uno


activo (Figura 4). Ambos estaban separados por unos 500 métros y se localizaban
en el páraje Siete Montes, ubicado al oeste de Chupa Pou a una distancia de unos
ETNOARQUEOLOGÍA DE ASENTAMIENTOS ACHÉ 13

0 m 2
Siete Montes
Figura 3. — Campamento abandonado de Siete Montes.

4 kilómetros. Estos campamentos habian sido utilizados sucesivamente рог el


mismo grupo de cazadores, los que en 1984 desarrollaban una estrategia de
subsistencia caracterizada por expediciones de caza y recolección que retornaban
al campamento central. Efectivament, cuando nosotros Uegamos al campamento,
en horas del mediodía, solamente estaban los nifios, pues todos los adultos estaban
en la selva cazando o recolectando alimentos. Al atardecer los adultos retornaban
al campamento con el resultado de sus actividades. Conocemos otřas referencias
sobre campamentos funcionando de la misma manera. Por ejemplo, sabemos de
un viaje en el que un grupo de cuatro familias Aché se dirigió en Agosto о
Septiembre de 1983 hacia una zona ubicada a unos 25 kilómetros al este de Chupa
Pou. АШ acamparon en las inmediaciones de un pozo de agua, a unos 100 métros
de un campamento abandonado (Tabla 2). Una vez instalados allí, la subsistencia
se realizó de la manera arriba descripta, con los hombres saliendo de dia y
retornando de noche con sus presas (Eladio Ramirez, com. pers.)1. La explication
para instalar un campamento fijo allí fue que no habia otros lugares con
disponibilidad de agua.
En general en la literatura hay muy pocas referencias a campamentos usados
por más de dos dias (por ejemplo, Hill et al. 1984 :1 16; Hill y Hawkes 1983 : 187 ;
14 société des américanistes

Tabla 2.

Distancia Estructuras Fogones рог Basurales por


al agua habitacionales habitation habitación

Campamento abandonado 30 m 5 1.2 0.8*


Campamento activo 500 m 4 1.2 1
Campamento Ramirez 50 m 4 1 s.d.

* no se observa basural en la estructura 5, que es probablemente la más antigua del campamento.


Seguramente factores post depositacionales tienen que ver con la ausencia de basural visible,
s.d. : sin datos.
Información general de très campamentos utilizados más de un dia.

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Figura 4. — Campamento activo de Siete Montes

Vellard 1934 : 235), que incluyen los campamentos para la initiation de jóvenes
entre los grupos del Sur (Clastres 1972b : 129). Pero résulta claro que, bajo ciertas
circunstancias, se instalaban campamentos centrales. En ambos casos (Siete
Montes y el comunicado por Ramirez) se observa redundancia genérica (según
Hietala y Stevens 1977), dado que usan la misma zona pero en diferentes loci. Hay
que mencionar que la estructura de planta del campamento de agosto o septiembre
ETNOARQUEOLOGÍA DE ASENTAMIENTOS ACHÊ 15

de 1983 es semejante a las de los dos campamentos que observamos en Siete


Montes en 1984.
Estos sitios funcionan, dentro de la clasificación de Binford (1980), como bases
residenciales. Es decir que son utilizados regularmente como centro desde el cual se
efectuan expediciones de caza y recolección. Esto no implica que la economia Aché
pueda ser descripta como collector. Esto es, no hay almacenamiento de alimentos,
ni tampoco hay evidencias de un planeamiento a largo plazo de las actividades
económicas. Los Aché son, en este sentido, foragers que bajo ciertas circunstancias
instalan campamentos centrales. Una propriedad observada fue que estos
campamentos pueden permanecer equipados. Esta es una circunstancia que
requière algun comentario, ya que aparentemente se contradice con la falta de
redundancia específica mencionada más arriba. Efectivamente, solamente cuando
se piensa ocupar el mismo locus parece deseable dejar material depositado para
uso ulterior. La solución para esta paradoja es muy poco clara, pero el caso es que
por lo menos en una de las viviendas del campamento abandonado de Siete
Montes habia materiales depositados (Tabla 3)2. Probablemente la redundancia
genérica difiera de la específica solamente en el uso de las instalaciones, y entonces
los 100-500 métros de distancia entre antiguos y nuevos campamentos no sean

Tabla 3.

Sobre una vara en la estructura del techo


1 lámpara de querosén
3 pantalones cortos
1 lima de hierro
6 plumas (de flécha)
2 boisas varias (de azucar)
1 saco
1 plato
1 martillo
1 astil
1 punta dentada de flécha (rota; largo : 43cm)
1 pantalon
1 camisa
2 cucharas de metal

Colgando de un cordel
1 pantalon
1 camisa
1 hamaca
1 zapatilla de plástico (de nino)
1 tenedor de metal
1 bombilla
1 cráneo de mono
1 bolsita con semillas de mamon

Elementos depositados en la estructura habitacional 2,


Siete Montes, campamento abandonado.
16 SOCIÉTÉ DES AMÉRICANISTES

suficientes como para inhibir el equipamiento y su utilidad. Más importante nos


parece el hecho de que la conducta de equipamiento parece ser una caracteristica
crucial, y para nosotros inesperada, dentro de la adaptation Aché « clásica ». Se
podrá considerar que es un resultado de la reciente situación instaurada por la
cercania de la Misión? Tenemos información de que, por lo menos, hasta 1982 los
Aché quemaban sus campamentos antes de partir (Silvia Kahel, com. pers.). Silvia
Kahel manifesto su asombro al saber que el campamento de Siete Montes no
habia sido quemado. Esto apoya la idea de que toda la situación de equipamiento
es un rasgo muy reciente dentro de la adaptación Aché.
Hay información acerca de la existencia de pocos lugares a los que aún se
puede acudir encontrando una relativa abundancia de presas, sobre todo en los
alrededores de Chupa Pou (ver Hill et al. 1984 : 115-116). Esta situación de falta
de opciones puede ayudar a explicar la redundancia en el uso de algunos lugares
preferenciales donde aún hay caza. Esto deberá alterar el patron de nomadismo
aún parcialmente imperante. Conviene recordar el caso de los Yanomama, entre
quienes, ante presiones externas que llevan al sedentarismo, surge la movilidad
logistica a fin de mantener la eficiencia en la caza (Saffirio y Scaglion 1982). Hay
que observar que la subsistencia Yanomama no se centra en la caza, de manera
que podemos esperar que una situación semejante, gestada por el asentamiento fijo
de Chupa Pou, afecte aún más a cazadores como los Aché (ver Hill y Hawkes
r983 r 165)^
Algunas evidencias provenientes de otros grupos Aché también son relativa-
mente concordantes. Los Aché de Arroyo Morotí tenían, ya en 1965, viviendas
muy modificadas : « En el poblado de Arroyo Morotí las chozas están rodeadas
por una cerca de ramas y postes » (Tomasini 1969 : 83). Esto ocurre en el marco
de una adaptación que incluia la realización de circuitos nomades, al final de los
cuáles regresaban a Arroyo Morotí (Clastres 1972b : 60, 84). Parece probable,
entonces, que hablando estrictamente en el piano de la morfologia de los
asentamientos en Arroyo Morotí hayan ocurrido procesos semejantes a los que
observamos en Chupa Pou y alrededores, De todas maneras debemos destacar que
la situación descripta para Siete Montes no es tipica de lo que podriamos llamar la
adaptación « clásica » Aché, la que es esencialmente móvil y caracterizada por
campamentos transitorios (Clastres 1972a, Hill 1983).

Distribution de fogones y basurales. Se observaron varias regularidades en la


distribución de fogones. Estos están localizados siempre en un costado de la
estructura habitacional — 100 % de los casos — (ver también Clastres 1972a :
151). Los basurales se forman a partir de dicho fogón, hacia el exterior de la choza
y, conforme aumenta el tiempo de la ocupación, se hacen monticulares. El vaciado
de fogones va directamente alli (Figura 5). Esta caracteristica es interesante porque
parece asociarse con sitios habitacionales en sentido amplio, probablemente
usados más que unos pocos dias.
Para el caso del campamento abandonado de Siete Montes, se ha observado
que no todas las chozas están en el mismo estado, sino que algunas difieren
marcadamente con respecto a su integridad y contenido (Tabla 4). Esto sugiere
que hay un diacronismo en la utilization de dicho campamento, observándose
inclusive que la unidad numero 2 esta equipada (Tabla 3) como para ser
ETNOARQUEOLOGÍA DE ASENTAMIENTOS ACHÉ 17

Figura 5. — Estructura 3 del campamento abandonado de Siete Montes.


О

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II
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Ш

20 SOCIÉTÉ DES AMÉRICANISTES

Tabla 4.

equipadas
. , de
sin palmas
techo destruidas
casi

campamento
abandonado

Condición de las estructuras habitacionales de Siete Montes,


campamento abandonado.

Tabla 5.

Estructura habitacional Estructuras internas

A 1 fogón con très lefios


1 concentration de cáscaras de naranja
1 concentration de restos de médula de coco
В 1 fógon con un 1ейо
1 concentration de cáscaras de naranja y hojas de caraguatá
С 1 lecho de hojas de palma
1 fogón con třes lefios
1 concentration de cáscaras de naranja
D 2 fogones (con 3 y 2 lefios)
1 concentration de lefia
1 concentration de cáscaras de naranja
j

Rasgos internos de las estructuras habitacionales del campamento activo de Siete Montes.

reutilizada (Figura 6). En el mismo sentido podria interpretarse la unidad numero


4 (Figura 7). A la inversa, la unidad numero 5 ha sido parcialmente reciclada,
quitándole las palmas que conforman el techo y algunos postes, los que
seguramente se utilizaron para construir algunas de las chozas posteriores. Es
interesante observar que el basural asociado con esta unidad estaba completamen-
te « mimetizado » con el resto del suelo, dando una medida del poco tiempo
requerible para que se instaure la invisibilidad arqueológica, ya que la unidad
reciclada aim se mantenia en pie.

Campamentos semi-permanentes.

Desde la instalación de la Misión en 1978 se desarrolló en el area aledana al


núcleo un tipo de vivienda relacionada con una nueva actividad económica : el
cultivo por desmonte y quema.
ETNOARQUEOLOGÍA DE ASENTAMIENTOS ACHÉ 21

i-
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Figura 7. — Estructura 4 del campamento abandonado de Siete Montes.
22 SOCIÉTÉ DES AMÉRICANISTES

Tabla 6.

Estructura habitacional Estructuras internas

1 2 Concentraciones de pastos
1 fogón sin troncos, con palo inclinado asociado
1 fogón externo sin troncos
1 monticulo de ceniza
1 basural (incluye una « mochila » y una estera
2 1 fogón con très leňos
2 lechos de hoja de palma
1 canaleta, con monticulo interno
1 basural
3 1 fogón sin troncos
1 basural
4 1 fogón con très lefios
1 fogón con cuatro lenoš
1 basural
5 1 fogón con dos leňos

Rasgos internos de las estructuras habitacionales del campamento abandonado


de Siete Montes.

Tabla 7.

Instalaciones
Estructura habitacional Tamafio (m) Artefactos Fogónes 2 Basuraies
Pesados 1 Int. 3 Ext.

Chupa Pou 1 4.3 x 2.2 3 1 (4) 3 2


Chupa Pou 2 4.3 x 2.1 1 1 (0) 1 2
Chupa Pou 3 - - - 2
Chupa Pou 4* 4x 3.8 —1 1 0) 1 2
Chupa Pou 5** 2.25 x 2.2 1 1 (0) - 3
Chupa pou 7 — 1 1 0) 1 —

1. Esta categoría tabula artefactos para procesamiento de granos y moblaje.


2. Entre paréntesis numero de troncos présentes en cada uno.
3. Como « basural interno » nos referimos a residuos de areas de actividad específicas dentro de la
vivienda (por ejemplo : restos de mandioca, marlos de maíz, cáscaras de naranja) que luego son
removidos por limpieza.
* Abandonada.
** Abandonada en junio de 1984 (relevamiento en agosto de 1984). Habitaron très personas (madré,
padre e hijo).

Caracteristicas de las estructuras habitacionales del campamento semi-permanente.


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Figura 8. — Chupa Pou 1 y 2 del campamento semi-permanente.


24 SOCIÉTÉ DES AMÉRICANISTES

Estas constracciones están dispersas sobre los puntos más elevados del paisaje
ondulado, en zonas abiertas adyacentes a « jardines » ya abandonados o aún en
actividad. Difieren fuertemente de los dos tipos ya vistos (Figura 8 ; Tabla 7). Son
estructuras más sólidas, de planta cuadrangular о trapezoidal y totalmente
construidas con postes y madera-chapa. De cualquier manera, no son empleadas
por un largo tiempo. Tenemos información de mudanzas cada très о cuatro meses,
a partir de los cuales se construye una nueva vivienda en las inmediaciones de la
anterior. Apparentemente, estos movimientos no estarian directamente relaciona-
dos con el cambio de los « jardines » de cultive
Varias configuraciones las distinguen, además, de los otros tipos de viviendas,
Esas diferencias pueden ser detalladas del siguiente modo :

(1) Internas :
(a) Los fogones tienden a colocarse en el centro de la habitation, por lo general
cerca de un poste de la estructura. Chupa Pou 7, perteneciente a un individuo
Pané — hombre que asume el status de mujer (Clastres 1972b) — , représenta
una exception interesante, ya que su configuration interna reproduce las
viviendas de los campamentos centrales, pero no asi su téenica de construction
ni su lugar de emplazamiento (Figura 9).
(b) Hay areas de actividad específicas cercanas a los fogones.
(c) Los artefactos pesados y el moblaje (camas y mesas) se disponen en los
ángulos de las viviendas о junto a las paredes (Figura 8).
(2) Externas :
Estas configuraciones se refieren a los basurales. Se constate» la presencia de dos

Tabla 8.

Estructura habitacional Contenido del basural

Chupa Pou 4 cordeles de fibra vegetal


marlos de maiz
vaciados de fogón
trozos de tela
fragmentes de maděra trabajada
Chupa Pou 5 1 fragmente óseo indeterminado
1 maxilar de perro
1 costilla indeterminada
1 falange indeterminada
1 hueso quemado
3 vertebras indeterminadas
1 fragmente de tela azul
1 empeine de zapato
1 fragmente de maděra quemada
19 marlos de maiz

Contenido de los basurales principales del campamento semi-permanente.


ETNOARQUEOLOGÍA DE ASENTAMIENTOS ACHÉ 25

Figura 9. — Chupa Pou 7 del campamento semi-permanente.

por vivienda en la mayoria de los casos. Sin embargo, presentan distintas


caracteristicas :
(a) Basural principal о generalizado : es de tamaňo grande y contiene diversidad
de desechos (Tabla 8).
(b) Basural secundario o específico : de tamano pequefio y variedad limitada de
residuos. Por lo general, los desechos pertenecen a una clase de actividad unica
(Tabla 9).

A diferencia de los tipos de asentamientos anteriormente vistos, los basurales


no son alargados y no están ubicados adyacentes al fogón ni a los limites de la
vivienda. Al contrario, se hallan a cierta distancia de la misma (Tabla 10) y su
forma tiende a ser circular u oval, con una estructura apenas monticular. Es
frecuente hallar vaciados de fogón en los basurales principales.
26 SOCIÉTÉ DES AMÉRICANISTES

Tabla 9.

Estructura habitacional Contenido de los basurales

Chupa Pou 4 marlos de maiz


fragmento de tela
Chupa Pou 5 1) 14 marlos de maiz
1 fragmento de chala de maiz
2) 14 marlos de maiz
1 fragmento de tela
1 lata

Contenido de los basurales secundarios del campamento semi-permanente.

Tabla 10.

Tamano
Estructura habitacional Basural Basural Basural Basural
Principal Secundario Principal Secundario

Chupa Pou 1 0.5 0.5 2.3 x 1.5 1 1 x 1


Chupa Pou 2 0.3 0.7 2x 1.3 1.2 x 0.9
Chupa Pou 4 1.5 7 6x3 2x 1
Chupa Pou 5 1.5 1 2x2 1 x 1
1.5 x 1.5*

* posée dos basurales especificos.

Distancia de los basurales a la estructura habitacional y tamano (en métros).

La forma y ubicación de los basurales se comparan bien, en este caso, con los
de otros grupos humanos con economía de cultivo de desmonte y quema. Por
ejemplo, los Shipibo-Conibo del Ucayali Superior (Peru), donde las actividades de
depositación de la basura conforman acumulaciones de morfologia parecida a
« cáscaras de nuez » (De Boer y Lathrap 1979 : 128), muy similares a las de Chupa
Pou 2. Un caso similar puede ser apreciado en las Tierras Altas Mayas (Deal
1985), donde el area de descarte esta alrededor de las construcciones, aunque los
basurales no son tan concentrados como en el caso Aché. En estos la ubicación de
los dos basurales conserva una disposición en ángulo de 90 ; uno ubicado al frente
de la vivienda y otro a un lado de la misma (Figura 8).
Las condiciones que posibilitan tal configuración son las limpiezas periódicas
de las viviendas y fogones, agrupando los desperdicios fuera de las paredes de las
casas. Las prácticas de limpieza tienden a crear areas de acumulación fuera de los
ETNOARQUEOLOGÍA DE ASENTAMIENTOS ACHÉ 27

limites del espacio de vivienda y en loci diferentes de las areas de actividad (ver
Murray 1980).
Las viviendas de los campamentos semi-permanentes se separan notablemente
de las vistas anteriormente en cuanto a sus factores de localización, modos de
construcción, empleo del espacio interno y externo, y por su asociación a
condiciones de economia y movilidad algo diferentes.

IMPLICACIONES ARQUEÓLOGICAS

Funcionamiento del sistema.

En los très tipos de asentamientos que hemos presentado se manifiestan


marcadas diferencias de visibilidad arqueológica. Estas se relacionan minimamente
con :
(a) tiempo de ocupación;
(b) materiales utilizados para la construcción;
(c) incorporation diferenciál de moblaje y estructuras.

Todas estas características están causalmente relacionadas y las hemos


separado simplemente como dominios diferentes para la investigación arqueológic
a.
Es interesante ver que en una situación de cambio acelerado como la que se
aprecia en Chupa Pou, no rige la relación entre el tamafio de la vivienda y el
numero de individuos que las ocupan (Naroll 1962; Wiessner 1974), ya que al
pasar de los tipos de campamento transitorio a los de campamento central semi-
permanente se gana espacio por individuo. La simpleza de esta y otřas
correlaciones ya había sido expuesta por Wilk sobre la base de su trabajo entre los
Kelchi Maya (Wilk 1983).
De una manera general se puede decir que si nos movemos desde el primer tipo
hacia el tercero aumenta la importancia de la depositación secundaria de la basura.
A la inversa, en el tipo transitorio es dominante la depositación primaria (segun
Schiffer 1972). Esto sugiere correlatos inversos en términos de visibilidad y
resolution arqueológica. En pocas palabras, cuando aumenta la visibilidad
disminuye la resolution. Esa pérdida de resolution, a su vez, se manifiesta más
notoriamente en el piano del asentamiento individual. Si miramos al sistema
completo de asentamientos, nos encontramos con que el registro arqueológico que
se esta formando en Chupa Pou esta caracterizado mayoritariamente por
asentamientos del tipo semi-permanente. Sabemos que la visibilidad arqueológica
actual de asentamientos del tipo transitorio о central, de cuatro afios de
antiguedad, es absolutamente nula.
Las estructuras del tipo semi-permanente no alcanzan la complejidad de
aquellas que son características en sociedades agricultoras que habitan en
ambientes selváticos, como les Ashuas (Zeidler 1983), los Kelchi Maya (Wilk
1983), o los Tzeltal Maya (Deal 1985; Hayden y Cannon 1983). Esto seguramente
se correlaciona con el tiempo de ocupación de cada asentamiento y el grado de
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desarrollo de la economía agrícola. Hemos mencionado que entre los Aché la


movilidad es muy alta aún en el tipo de asentamiento semi-permanente. En cambio
los grupos enumerados pueden permanecer hasta varios anos en un asentamiento
dado. Esto hace que las expectativas con respecto a la preservavión arqueológica
entre los Aché y las otras sociedades enumeradas varien mucho. Efectivamente,
hemos observado que entre los Aché muchas veces quedan artefactos en uso
depositados en las viviendas (morteros de maděra, « mochilas », etc.), lo que
seguramente se debe explicar por la cercania de cada sucesivo nuevo asentamiento.
Esto hace que esos artefactos puedan considerarse, en términos générales, como
disponibles para uso futuro. Por lo tanto, la situation de abandono de una
vivienda no la excluye del sistema de asentamiento, ya que a lo dicho se agrega el
reciclaje de paredes y postes utiles ; de tal modo, la casa abandonada se convierte
en una especie de depósito de instrumentos y materiales para construcción. De esto
surge que la perspectiva regional es la unica que ofrece herramientas adecuadas
para calibrar el funcionamiento del sistema, al incluir sitios (casas, chozas)
abandonadas y en uso. Esto se observa claramente en el caso del campamento
abandonado de Siete Montes, donde coexisten chozas equipadas en un sentido
diferente al recién expuesto, esto es, con artefactos depositados especificamente
para ser utilizados en el futuro, junto a chozas recicladas, esto es, chozas que
funcionaron como depósito de materiales para construcción (Tabla 4).

Criterios de contemporaneidad y anàlisis espacial.

Muchas veces el arqueólogo encuentra más de un fogón dentro de una misma


unidad analítica (capa, nivel, etc.) y, usualmente, presupone que fueron utilizados
contemporáneamente (De Lumley 1969 : 198; Gould 1971 : 166; Movius 1966 :
321 ; Singer y Wymer 1982 : 30). Generalmente los arqueólogos han considerado
que no era necesario justificar esta interpretación, por considerarla muy obvia. En
realidad es muy difícil de justificar. Sin entrar en el espinoso tema del lapso
involucrado en muchas de las unidades analiticas que utiliza el arqueólogo,
podemos decir que la evidencia etnoarqueológica acerca de la distribución espacial
de fogones atenta dicha explication. Vimos en los campamentos transitorios que
no habia diferencias significativas entre el numero y la proximidad de fogones
contiguos. Al no haber una covariation, no hay razones para suponer que la
cercania entre fogones esté vinculada con una sincronia en el funcionamiento de
los mismos, ni que se pueda hacer una asociación estricta entre las areas de
residuos vinculadas a cada uno de los fogones. L. R. Binford documenta en el sitio
Mask (Alaska), utilizado actualmentes por los cazadores Nunamiut, lo siguiente :
« The core area of the site is between 3 relatively large glaciar boulders. Among these
boulders were 5 hearths (...) I never observed all 5 hearths in use at the same time; in fact, I
never saw more than 2 in simultaneous use, and that was rare » (Binford 1978b : 348).

Si recordamos que el sitio Mask es utilizado afio tras aňo como campamento
de caza, y que la redundancia ocupacional es probablemente específica, entonces
este caso refuerza la opinion apuntada sobre contemporaneidad y cercania en el
funcionamiento de fogones, contrariamente al presupuesto admitido. Se puede
argumentar que al pretender dicha contemporaneidad, el arqueólogo busca
ETNOARQUEOLOGÍA DE ASENTAMIENTOS ACHÉ 29

interpretar en una escala etnográfica lo que requière ser tratado en escala


arqueológica.
Clive Gamble ha sugerido que el espaciamiento de 3 métros entre fogones del
Paleolítico europeo puede constituir un medio para considerar conducta repetitiva,
y que reflejaria un patron funcional distinto al de aquellos espaciamientos
inferiores a esa distancia (Gamble 1986 : 256-262). Los casos Aché y Nunamiut
tampoco parecen reflejar esta correlación. Lo que háce más interesante esta
situación es que los ejemplos provienen de grupos ubicados en extremos opuestos
de la tipologia de cazadores-recolectores(ver Binford 1980). De aqui se desprende
que la linea de trabajo sugerida por Gamble debe ser considerada con precau
tion3.
Pensamos que estas observaciones son pertinentes tanto para sitios a cielo
abierto, como para sitios en cuevas о aleros. Por ejemplo, en un sentido estricto el
caso del sitio Mask puede ser tratado como intermedio, ya que los bloques
glaciales entre los que se instalaron los fogones imponen una restriction a la
dispersion espacial de los residuos résultantes de las actividades. El análisis de las
diferencias que resulten de los distintos arreglos ocasionados por las restricciones
de espacio impuestas por paredes rocosas u otros limites naturales, debe incluir
otras variables además de las discutidas aqui, taies como distancia a la pared, area
de dispersion de los residuos vinculada a cada fogón y relation de los fogones con
otras estructuras.

Variabilidad del registro arqueolôgico.

La discusión acerca del significado de la variabilidad del registro arqueolôgico


tiene una larga historia que se substancia a partir de la polémica sobre el
Musteriense (Binford y Binford 1966; Bordes y De Sonneville-Bordes 1970). A
partir de alli se desarrolló una linea de investigation dedicada a establecer las
causas de las variaciones observadas.
Parece ser aceptado hoy en dia que un mismo grupo cultural produce diferentes
« registros arqueológicos ». El caso Aché muestra la certeza de este enunciado, tal
como habia sido mostrado para otros grupos de cazadores-recolectores (Binford
1982). Esta situación debe hacernos dudar de la afirmación usualmente hecha por
los arqueólogos, de que grupos de artefactos tecno-morfológicamente diferentes
fueron confeccionados por grupos humanos distintos y, por lo tanto, pertenecien-
tes a culturas о tradiciones culturales diferentes. Tal presupuesto es comun en el
tratamiento de la evidencia arqueológica de la Patagonia Argentina, donde fue
propuesta la existencia de industrias independientes, algunas de las cuáles sólo se
diferenciaron tomando en cuenta el simple hecho de presentar proporciones
distintas en los tipos de artefactos y de materias primas liticas empleadas (por
ejemplo, Bórmida 1964). Este tipo de análisis aun se realiza hoy en dia. Por
ejemplo. Orquera (1984-1985 : 250), quien mediante este procedimiento admite un
Sanmatiense en detrimento de un Neuquense. En realidad, las razones para
sostener el Sanmatiense son tan pobres como las que se utilizaban para proponer
el Neuquense.
30 SOCIÉTÉ DES AMÉRICANISTES

CONCLUSIONES

Hemos visto que la observation de casos actuates lleva a poner en duda


diferentes acercamientos metodológicos utilizados por los arqueólogos. Eso lleva a
una revision de los presupuestos empleados como punto de partida para la
formulation de modelos e hipótesis explicativas. Por ejemplo, la falta de
correlation entre variables que parecian obviamente interprétables, tal como
mostramos con el caso de la distancia entre fogones y la contemporaneidad de uso.
La necesidad de dotar de significado a las regularidades observadas, resalta el
valor de los estudios etnoarqueológicos, ya que éstos permiten individualizar
agentes causales. Los patrones tradicionalmente considerados como interpretati-
vos, sólo son herramientas descriptivas. Contra lo que usualmente se crée, la
existencia de abundante evidencia empírica no torna más verdadera a una
hipótesis o a un modelo. Lo que se necesita es un medio de poner a prueba las
predicciones que se siguen de dichas hipótesis о modelos. Para que una ciencia sea
realmente interpretativa debe tener como objetivo la busqueda de relaciones de
necesidad de valor general.
Esto muestra, finalmente, que cualquier tipo de sociedad puede ser estudiada
desde el punto de vista arqueológico, destacando asi la autonomía y la amplitud de
la Arqueología más alla de los limites artificiales en los que se la ha considerado
clásicamente dentro de la Antropologia*.

Agradecimientos
Queremos agradecer a las siguientes personas por su colaboración para la realización del
trabajo de campo : Dr. Francisco Pérez Maricevich, Dr. Adriano Irala Burgos, Dr. Miguel
Chasse Sardi y Lie. Alfredo Tomasini. Durante el trabajo de campo recibimos el valioso
apoyo de Eladio Ramirez, Silvia Kahel, Crecencia Carisimo y el Padre Fernando. También
queremos destacar la buena voluntad del Padre Wayne Robins, quién no se encontraba
durante nuestra visita a Chupa Pou, y quién nos ha invitado a continuar nuestros trabajos
en el future Los Dres. Kim Hill y Kevin Jones nos brindaron desinteresadamente mucha
información que es resultado de sus propios trabajos entre los Aché. Finalmente queremos
destacar la colaboración manifestada por los miembros de la comunidad Aché de Chupa
Pou.
* Manuscrit reçu en décembre 1988, accepté pour publication en janvier 1989.

NOTAS

1 . Este lugar esta ubicado a tan solo un dia de marcha de Chupa Pou, aunque las familias tardaron
dos dias en hacer el recorrido, debido a las sucesivas paradas para que las mujeres recolectaran naranjas.
Los hombres, durante el recorrido, iban atentos al hallazgo de huellas de animales, y constantemente se
separaban del grupo para cazar.
2. Hawkes et al. (1982 : 383) describen lo que los Aché llevan usualmente consigo : « ... axes,
carrying baskets, and sometimes a pet (usually a monkey or coati). Each basket held all the household
gear brought by a single family, including one or more knives and pots, a plate or cup, matches, a sewing
kit, extra clothing, and a mat or blanket (...) sugar and salt ».
3. Ver Gould y Yellen (1987) para considerar otra alternativa.
ETNOARQUEOLOGÍA DE ASENTAMIENTOS ACHÉ 31

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